El exsecretario general del PSOE Joaquín Almunia ha advertido de que, en una Europa cada vez más envejecida, "rechazar los flujos migratorios es un error" y que el reto de la UE es impedir que la llegada masiva de inmigrantes resulte en una "sociedad menos cohesionada".
En una entrevista con Efe con motivo de la publicación de su obra "Ganar el futuro. Cómo Europa y la socialdemocracia pueden salir juntas de sus crisis", Almunia ha reflexionado sobre el debate político, la integración europea y los grandes retos que debe afrontar la UE.
Para el también excomisario europeo, el gran desafío de la UE es comprender que la llegada constante de inmigrantes "no se trata de un fenómeno temporal, sino de un fenómeno que va a seguir ahí durante mucho tiempo".
"Ante una sociedad cada vez más envejecida, los europeos tienen que mirar con una perspectiva positiva a los flujos migratorios", ha asegurado Almunia, para quien lo más importante es que "el proyecto europeo impida que la inmigración tenga como consecuencia una sociedad menos cohesionada".
Auge populista
El político socialista también ha explicado cómo la "complejidad" de la crisis de los últimos años ha fomentado un discurso populista en "el centro, norte y este de Europa donde se han colado la derecha y la extrema derecha populista".
La inseguridad económica y social, pero también el terrorismo internacional, han puesto en evidencia la falta de liderazgo en el mundo, al desconocerse quién tiene la responsabilidad de dar una respuesta a estos problemas.
Por toda Europa, los ciudadanos han perdido la confianza en sus líderes políticos, lo que ha generado "inquietud, incertidumbre y miedo", que han abierto la puerta al populismo, ha comentado.
En España, el nacionalismo independentista catalán y el "nacionalismo español más tradicional y conservador son reflejo de ese populismo" que resulta en una "simplificación" del análisis del panorama actual hasta el punto de convertirlo en una "caricatura".
El futuro de la UE
En cuanto a la Unión Europea, Almunia considera que no hay futuro fuera de ella, pero ve necesario reforzar la construcción del proyecto común con "ideas claras".
Así, ha explicado que, para España, "Europa era la forma de dejar atrás todo aquello que se quería abandonar", la solución a todos sus problemas; pero una vez dentro de la UE "ves que no todas las respuestas están preparadas", que queda mucho por hacer.
En este punto, el ex dirigente del PSOE, ha argumentado que el futuro de la UE debe estar basado en los valores de la socialdemocracia si no quiere ser una "Europa coja", aunque es consciente de que los malos resultados cosechados por esta corriente en numerosos países obligan a una renovación profunda.
Por último, Almunia ha valorado que el peso político de España en la UE ha disminuido, y ha considerado que el "inicio del declive" fue la decisión del expresidente José María Aznar de posicionarse del lado del fuera presidenta estadounidense George W. Bush en la guerra de Irak.
Preguntado por si cree que el actual presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, será capaz de recuperar la influencia de España en Europa, Almunia ha respondido: "como español me gustaría responder que sí, pero tengo mis dudas".