España

Génova recalca la "soledad" de Sánchez y vincula su continuidad al 9-J: "Una victoria acorta la legislatura"

Génova atisba al presidente del Gobierno sumido en un momento crítico, agravado tras dos varapalos parlamentarios en 48 horas. "No convence ya ni a Yolanda Díaz", subrayan

Alberto Núñez Feijóo es aplaudido por el núcleo duro de su bancada en el Congreso de los Diputados, este miércoles, tras contestar al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Eduardo Parra | EP

"La soledad del presidente no tiene precedentes. El Gobierno no es capaz de aprobar en las Cortes ni siquiera lo que se diseña en la mesa del Consejo de Ministros. Sánchez no tiene capacidad para dirigir el futuro de la nación cuando sus prioridades legislativas no convencen ya ni a Yolanda Díaz". Así de tajantes se mostraban fuentes de Génova poco después de que el Gobierno, a primera hora de este jueves, decidiera retirar su proyecto de reforma de la Ley del Suelo. Sin apoyos, sin unidad siquiera dentro de la propia coalición, abocados a un segundo fracaso parlamentario en 48 horas –tras el varapalo de la ley contra el proxenetismo– y en manos del PP.

La lectura en la dirección nacional de los populares es clara: el presidente del Gobierno está en una situación crítica que podría agravarse tras las elecciones europeas del próximo 9 de junio, cuya campaña empieza hoy. "El problema, en mi opinión, es que el Gobierno está roto", zanjó el líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, en una entrevista en Telemadrid, al mediodía de este jueves. "Y es sorprendente que cuando el Gobierno está roto y la coalición parlamentaria también lo está, ahora parece ser que el problema lo tiene la oposición", remachó. Tal ha sido el escozor que ha causado en el PSOE el titubeo estratégico del PP –"la incertidumbre es parte del plan", aseguran a Vozpópuli fuentes cercanas al líder del PP– que su portavoz, Patxi López, se ha quejado de que lo han hecho para "meter el dedo en el ojo" de Sánchez.

Pero no ha sido sólo el PP quien ha quebrado los intereses de la parte mayoritaria del Ejecutivo. El Congreso ha asistido este jueves a cómo hasta cinco votaciones en materia internacional han dividido al PSOE y Sumar. Ni el Sáhara, ni Ucrania, ni la inversión en Defensa de un 2% del PIB, tal y como pactó la OTAN; ni el respeto a los Derechos Humanos en dictaduras de Latinoamérica, ni elecciones libres en Venezuela. En todas ellas, el voto a favor del PSOE chocó con la oposición del partido de Yolanda Díaz.

"Si el PP derrota al PSOE en las elecciones europeas, la legislatura quedaría en suspenso", se aventuran en el 13 de Génova. "Una victoria del PP acorta la legislatura", matizan otras fuentes cercanas al líder del PP. No obstante, lo hacen con cautela, sabedores de la capacidad demostrada por Sánchez de imantar, y más con sus últimos movimientos, el electorado más de izquierdas y "más radicalizado". La tesis de Génova es que ganarán el 9-J, pero que Sánchez, al haber "fagocitado a sus socios y, en especial, a Sumar" y atraído los retales de cierto voto nacionalista, podría "resistir". "A él le vale perder por poco", zanjan.

"Someterse a una cuestión de confianza"

Pero Alberto Núñez Feijóo ha olido la sangre. Fue el propio líder del PP quien este miércoles, en una entrevista nocturna en la COPE, horas después de confirmar que citarán a Sánchez en la comisión de investigación del Senado, dio un paso más y lo invitó a someterse a una cuestión de confianza en el Congreso. "Si la esposa de un primer ministro de la Unión Europea está en esta situación", dijo sobre Begoña Gómez, "el primer ministro, en mi opinión, debería tomar una decisión muy clara y muy determinante, y es comparecer en el Congreso y, como mínimo, someterse a una cuestión de confianza". Y apostilló: "Si tuviese un poquito más de principios, debería de haber dimitido, porque no es digno de presidir el Gobierno de la nación".

Así invitó Feijóo a Sánchez, por primera vez, a activar el mecanismo previsto en el artículo 112 de la Constitución. Un instrumento mediante el cual el presidente del Gobierno puede reclamar el apoyo de la Cámara a todo su programa o a una determinada cuestión política. Con más síes que noes –conseguir una mayoría simple–, se entiende la confianza como otorgada. En caso contrario, Sánchez, en este caso, debería presentar su cese y el de todo su gabinete de ministros. Sólo Adolfo Suárez en 1989 y Felipe González en 1990 sometieron su poder a dicho mecanismo constitucional, y ambos lo superaron con éxito.

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  • M
    marqueslinchado

    ¿Una victoria de quién? ¿Von der Glez o Montserrat Leyen?