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Nace el 'espíritu del Ateneo': la vieja guardia del PSOE se conjura para defender la Constitución

La vieja guardia del PSOE insiste en que su objetivo no es Pedro Sánchez, ni derogar el sanchismo, sino que nadie desborde la Constitución: "Habrá consecuencias muy graves"

Nace el espíritu del Ateneo: la vieja guardia del PSOE se conjura para defender la Constitución
Felipe González y Alfonso Guerra, en el acto del Ateneo. Jesús Hellín / Europa Press

¿Existe un espíritu del Ateneo tras el acto de Felipe González y Alfonso Guerra? La vieja guardia del PSOE se debate entre la resignación y la voluntad de seguir presionando. Entre los presentes el miércoles por la noche en el Ateneo hay dos corrientes de opinión. Los más escépticos creen que esta presión "no sirve para nada" y que nadie parará la amnistía.

Los más optimistas consideran que Pedro Sánchez acabará cediendo y habrá repetición electoral ante un Carles Puigdemont que, dicen, "no tiene nada que perder".

"Es increíble que dos personas de 80 años estén sosteniendo una voz crítica, que existe en el PSOE, con esa lucidez en su exposición y con tanta repercusión", explica un socialista de Madrid. "Les llaman viejos y dicen que ya no es su tiempo, pero lo que están haciendo es digno de elogio".

El espíritu del Ateneo no es contra Sánchez

Los asistentes a la presentación del libro de Guerra en el Ateneo -y los que siguieron el acto por streaming- destacan las magníficas intervenciones del ex presidente y el ex vicepresidente. Y coinciden en señalar que sus palabras no son contra Sánchez, ni contra el PSOE. El único objetivo, dicen estas fuentes, es defender la Constitución.

"Somos conscientes de que la derecha usa estas las intervenciones contra Sánchez y el PSOE, pero nuestro objetivo no es Sánchez, ni derogar el sanchismo", señalan. "Lo que se trata es de poner cordura a todo esto y no dejarse chantajear por el separatismo. Nada está por encima de la Constitución. Esa es la barrera que no se puede franquear".

En ese sentido, lamentan que Sánchez haya dado aire a un Puigdemont que "estaba amortizado" políticamente. Y critican que se quiera enmarcar la amnistía o la celebración de un referéndum en una especie de diálogo permanente para resolver el conflicto catalán.

"La realidad es que la amnistía se hace por siete votos de una investidura, y todo lo demás es mentira", dice un socialista más joven pero apartado de la actual dirección. "No podemos vender que se trata de buscar el encaje de Cataluña en España, porque entre otras cosas ese encaje no se puede acordar sin el PP".

Existe verdaderamente un grupo de la vieja guardia socialista que considera que hay un espíritu del Ateneo nacido del acto del miércoles. Y aseguran que hay ex dirigentes del PSOE que seguirán expresando su opinión crítica si, como parece, se acuerda una amnistía para Puigdemont.

"No es una decisión más; no son los indultos", explican. "Por más que el hartazgo de la sociedad asuma la amnistía habrá consecuencias, porque es romper el principio de igualdad y de supremacía de la Ley. Y esto tendrá consecuencias".

"Esto no sirve para nada"

No todos los participantes y figuras relevantes de la izquierda que asistieron al Ateneo son tan optimistas sobre los beneficios de seguir en los medios denunciando estos acuerdos. Algunos de ellos, destacados actores de la política en el pasado, dicen que "no sirve para nada". Y que Sánchez tiene la decisión tomada.

Ferraz ha respondido con dureza a las palabras de Guerra y González en el Ateneo. Vozpópuli ha informado de que la dirección del PSOE ha pasado a la ofensiva contra sus ex dirigentes. El secretario de Organización del partido, Santos Cerdán, ha asegurado que los "desleales" son ellos y no Sánchez por no respetar las decisiones apoyadas por la mayoría dentro de los congresos del partido.

"Desleales son los que no respetan las mayorías del partido, ¿no?, yo creo que en el 2016 hubo una decisión de los militantes, que fue refrendada en el 39 y el 40 Congreso del PSOE, y esa es la voluntad y la palabra del Partido Socialista", ha dicho Cerdán.

El runrún del Ateneo seguirá hasta que Sánchez desvele en qué consiste su Ley de Alivio Penal. Los más convencidos creen que la única solución es fundar otro partido de centro izquierda. Pero para eso, dicen, "hace falta mucho dinero".

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