“El dinero que los cineastas recibimos como anticipo lo devolvemos con creces al Estado a través de los impuestos". Con esa frase, Pedro Almodóvar levantó a los presentes en el Recinto Ferial de Valladolid, contestando así a Juan García-Gallardo, vicepresidente de la Junta de Castilla y León, que les llamó "señoritos". Pero, ¿el cine español devuelve "con creces" lo que le prestan? La respuesta es sencilla: no.
En 2023, el cine español recibió en ayudas el doble de lo que recaudó. En concreto, el Estado destinó 167 millones de euros a producciones de distinto tipo, pero solo recogió 81.5 millones, de los cuales tan solo regresó una parte mínima de forma directa (8 millones en concepto de IVA), más los impuestos abonados por las productoras en concepto de contratación de personal (IRPF y Seguridad Social).
Esta tónica ha sido habitual en los últimos cinco ejercicios a excepción de 2019, año en el que la recaudación fue de 91,7 millones de euros y las ayudas de 47,9 millones. En 2018, 2020, 2021, 2022 y 2023, el cine español ha recibido con creces un mayor anticipo de lo que ha devuelto a través de impuestos. En defensa de Almodóvar hay que dar un dato reseñable: entre 2007 y 2017, el cine español siempre generó más de lo que recibió a través de ayudas.
Esta tónica es la que se viene dando desde la pandemia de manera regular. En 2021, 2022 y 2023, las ayudas fueron mayores que la recaudación. En la última década, además de estos tres años, también se produjo este fenómeno en 2018, cuando el cine español recaudó 103,8 millones de euros y recibió 109,5 millones en ayudas.
Cierto es que los años 2020 y 2021 la recaudación se vio azotada por la crisis del coronavirus, que obligó a cerrar las salas de cine durante meses y después, con las restricciones para evitar contagios, la afluencia de público no fue normal. Pero en 2022 y 2023, con las restricciones eliminadas por completo, la relación recaudación-ayudas siempre ha tenido un balance negativo, especialmente acentuado este año en el que las ayudas a la cinematografía, según el BOE, han subido hasta los 167 millones de euros, tal y como reflejan los Presupuestos Generales del Estado de 2023.
Este aumento de presupuesto no se ha traducido en producciones más atractivas para el público español, que no termina de regresar a las salas tras la pandemia. Mientras que la afluencia de público en cines ha crecido a lo largo de 2023 un 29% respecto al año anterior, la recaudación de las películas españolas se ha visto reducida en un 2,29% y el número de espectadores en 800.000 personas. Esto indica que aunque hubo más gente en las salas, hubo menos españoles que se decidieron por ver una producción nacional.
De los 307 largometrajes estrenados en salas durante 2023, tan solo 17 lograron superar la barrera del millón de euros en facturación, destacando tres por encima de las demás: 'Campeonex' (11,9 millones), 'Ocho apellidos marroquís' (8,6 millones) y 'Vacaciones de verano', (7,4 millones).
De ahí la importancia del discurso de Juan Antonio Bayona durante los Premios Goya, que reivindicó la importancia de recuperar al público para hacer fuerte al cine español. Nuestro director más internacional, tras hacer de la Sociedad de la nieve un éxito -se llevó doce galardones-, afirmó que el cine español necesita recuperar al público para tener "una industria fuerte" y así poder trabajar "con los recursos necesarios para desplegar todo el talento que tenemos". Un discurso que choca de frente con otros como el de Eduardo Casanova, que hace años pidió desde la alfombra roja más recursos para hacer su trabajo: "Necesitamos dinero público para nuestras películas".