Ribó descarta dimitir pero no garantiza acabar la próxima legislatura

La comparecencia del alcalde en funciones de Valencia, Joan Ribó, era esperada desde el domingo por la noche por ver si despejaba su futuro. El líder de Compromís en la ciudad ha defendido hoy los resultados de su proyecto –que ha perdido un total de 8.000 votos y 1 edil– y ha garantizado, de momento, su continuidad.

Acompañado de su grupo municipal, Ribó ha asegurado tras asistir a la Ejecutiva de Compromís para analizar el 28-M que "no voy a dimitir" y adelanta que seguirá como jefe de la oposición en el hemiciclo municipal en una decisión que ha sorprendido a muchos dentro de Compromís que consideraban que el alcalde daría un paso al lado.

El único líder

La convocatoria de las elecciones generales del 23-J han impedido que Joan Ribó haga ese movimiento en estos momentos porque es, sin duda, el liderazgo más fuerte que le queda a la coalición nacionalista y abandonar ahora supondría poner en riesgo las posibilidades de que Compromís tenga una voz en las Cortes Generales.

9 puntos más que Baldoví

Joan Baldoví ha quedado por debajo 9 puntos por debajo en porcentaje de votos (14,3%) frente a los 23,9% que obtuvo Ribó. Esta circunstancia –unida a que Mónica Oltra ya no es un activo electoral como lo fue en el pasado porque sigue atrapada en el caso judicial que analiza si obstaculizó desde su departamento en la Generalitat la investigación de los abusos que su ex marido cometió sobre una menor tuteada– hace que Ribó sea el último valor del Compromís pujante de 2015.

Al igual que ha sucedido con la vicealcaldesa del PSOE, Sandra Gómez, Ribó no ha querido echar la sal a la herida electoral y rechaza hacer una autocrítica real de lo que ha sucedido para perder la vara de mando que traspasará a María José Catalá el próximo 17 de junio.

No es fruto de la gestión

Todo se justifica en que "se ha producido una ola azul" fruto de factores externos como es la confrontación ideológica en torno a Pedro Sánchez, pero, a su juicio, "no es fruto de la gestión" que ha desarrollado los últimos años.

Los problemas de inseguridad, limpieza y los altos impuestos que sufren los vecinos de Valencia no han aparecido en el argumentario de Ribó para justificar su próxima salida de la Alcaldía, víctima de los resultados del pasado domingo.

Así pues, Ribó ha asegurado que igual que hablaba que si Sandra Gómez sacaba más votos que él, sería vicealcalde, "ahora estaré donde siempre dije que iba a estar: donde me colocara la ciudadanía».

Si la recogida del acta de concejal supone que estará toda la legislatura, Ribó no ha querido resolver la incógnita, aunque todo apunta a que cuando pasen las elecciones generales es probable que ponga fin a su dilatada trayectoria política por diferentes partidos a la izquierda del PSOE.

Estaré un tiempo al frente del grupo municipal de Compromís salvo que me atropelle un coche o tenga una enfermedad grave Joan Ribó

De momento, hoy ha tirado de ironía y ha afirmado que estará "un tiempo al frente del grupo municipal de Compromís salvo que me atropelle un coche o tenga una enfermedad grave".

Mientras, la que será alcaldesa de Valencia, María José Catalá, se ha reunido hoy con sus concejales para perfilar el traspaso de poderes. Y precisamente ha situado una de sus prioridades en la bajada de impuestos y tasas municipales que se activará antes de verano para que sea efectiva el día 1 de enero de 2024.

Además, Catalá ha anunciado que “mis primeros 100 días van a estar centrados en poner en marcha una bajada de impuestos, un plan de choque de limpieza, sacar oposiciones para poner 500 policías más en la calle y empezar a construir vivienda pública para que los jóvenes puedan emanciparse y desarrollar su proyecto personal y profesional”.