Puig coloca a dos 'delfines' en el segundo escalón del Gobierno pero descabeza el grupo en las Cortes

El expresidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha tenido finalmente el premio de consolación de Pedro Sánchez y dos de sus 'delfines' estarán en el segundo escalón del Gobierno: Rebeca Torró y Arcadi España.

Rebeca Torró es actualmente la portavoz del grupo socialista en las Cortes Valencianas y fue consellera de Industria en la pasada legislatura y persona clave en la llegada de Volkswagen a Sagunto. Ha sido hasta la fecha la encargada de hacer la oposición a Carlos Mazón con un tono duro y agresivo que ahora queda sin un claro heredero.

Máxima confianza

Arcadi España, por su parte, es la persona de máxima confianza de Puig (ya lo era en su Gobierno) y exconseller de Hacienda. Ocupaba la portavocía adjunta del grupo parlamentario, junto a María José Salvador.

Los dos exconsellers, según adelantó la Ser, dejarán sus escaños en las Cortes Valencianas antes de poner rumbo a sus nuevas obligaciones dentro de los ministerios en la capital de España.

Su hueco en la Cámara autonómica será cubierto por Pedro Ruiz y Xelo Angulo que pasan por ser personas cercanas a Ximo Puig (como casi todo el grupo parlamentario).

Remodelación del grupo

Esta designación va a provocar una remodelación contrarreloj del grupo parlamentario socialista que deberá realizar los nombramientos con tino para no perder la oportunidad de hacer oposición a los Presupuestos de la Generalitat para 2024, ya que la elaboración y aprobación de las cuentas autonómicas es un momento del año parlamentario clave para marcar un perfil propio.

Al margen de María José Salvador, también suena como posible inquilino de la plaza de portavoz el actual secretario de Organización del PSPV, José Muñoz, quien se haría cargo en una etapa de clara transición para los socialistas.

Mercedes Caballero, Toni Gaspar, o Rosa Peris también cuentan con voces dentro del grupo que les otorgan opciones para realizar esa labor, según las fuentes consultadas por Vozpópuli.

Ximo Puig, por su parte, podría mantenerse como presidente del grupo parlamentario, aunque en estos momentos nadie garantiza qué puede suceder en los próximos días.

Incógnitas sobre la sucesión

Este movimiento también afecta de lleno a la carrera sucesoria del propio Puig. Para el congreso nacional del PSPV que está previsto que se celebre en otoño de 2024 ya había varios 'candidatos' entre los que se encontraban Torró y España.

Ambos van a tener ahora una plataforma diferente, más discreta en lo mediático que lo que supone la portavocía en las Cortes autonómicas, pero con más peso en la agenda valenciana.

Junto a la ministra de Ciencia y Universidades, Diana Morant, se convierten ahora en aspirantes de mayor calado y señalados para bien (sobre todo en el caso de Torró a quien se incorpora al Gobierno por su gestión en la Generalitat) por el mismo Pedro Sánchez.

La delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Pilar Bernabé, sigue asomando la cabeza en esa carrera, en la que su cercanía a Puig y al resto de familias del PSPV la colocan como una de las favoritas.

Falta por ver cómo encajan este movimiento tanto el secretario general de la provincia de Valencia, Carlos Fernández Bielsa, como el de Alicante, Alejandro Soler, que pasan por ser los principales adversarios en la reconstrucción del PSPV más allá del 'ximismo'. Y José Luis Ábalos observa los movimientos para decidir más adelante con quién alía sus fuerzas.