Cómo funciona Cervus III, el sistema antidrones español que protege a nuestros soldados de todos los peligros

El ataque de la pasada madrugada de Irán sobre Israel, cuyos misiles y drones fueron repelidos al 99% por el potente sistema de defensa israelí, ha puesto sobre aviso al resto de naciones. Aunque todavía se desconocen las consecuencias de este acto de Irán, lo que ha quedado claro es que contar con un sistema de defensa aéreo y terrestre resulta fundamental.

¿Cuenta España con una red de protección de este calibre? La respuesta es sí, y se llama Cervus III. Diseñado por las empresas españolas TRC y Escribano, esta cúpula de origen 100% nacional protege decenas de infraestructuras y a los soldados españoles en sus distintas misiones.

En Vozpópuli hemos podido charlar con Alfredo Estirado, consejero delegado de TRC, quien nos explica el origen y funcionamiento de este ángel de la guardia que salvaguarda nuestros intereses a diario. Si accedemos a la página web de TRC, nos definen Cervus III como "un sistema de detección, identificación, seguimiento y neutralización de drones".

"En su tercera evolución incorpora una capa de inteligencia artificial que mejora la capacidad de respuesta a las amenazas mediante modelos de machine learning y gestión automatizada de la información, de cara a potenciar la capacidad de respuesta de los operadores militares".

Origen y funcionamiento de Cervus III

Comenta Estirado que en TRC detectaron "hace cuatro o cinco años que la amenaza no estaba en el dron anunciado y grande. Pensábamos que había otro tipo de drones caseros que tenían cargas de 200 gramos de dinamita, que puede parecer poco, pero es que con esa cantidad te 'cargas' una base".

En el Ejército de Tierra, desde la unidad de guerra electrónica, empezaron a trabajar en ello. "Existen unidades dentro del Ejército que se dedican únicamente a escuchar e interpretar, pero sin poder emitir, porque sino te conviertes en objetivo para el enemigo", señala Estirado.

Partiendo de esta base, Cervus III marca la diferencia como ningún otro sistema de defensa en el mundo. "Nuestras 'orejas' escuchan todo, sin emitir, y tipificamos las señales en base a sus comportamientos. Vemos cómo se mueve y actuamos con nuestros diferentes modelos de inteligencia. Así sabemos si es un dron o no. Podríamos descubrirlo a varios kilómetros en medio de una bandada de pájaros", explica.

Existen dos versiones, la denominada Cervus, de uso militar, y otra civil, que usan los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado más importantes del país. El primero tiene capacidad de disparo, el segundo no. Amén de un alcance mayor al ser en zonas de guerra o con desierto de por medio.

"Aprende mediante machine learning todas de actuar y las aprende, lo que lo convierte en un sistema completamente autónomo. Analiza y propone acciones, pero siempre las ejecutan humanos. Es la herramienta que usa el Ejército de Tierra, en el mando de artillería antiaérea, y está desplegado en zonas de operaciones".

Por último, apostilla Estirado, Cervus III es deseado por muchas naciones en todo el mundo, ya que es un sistema pionero que está dando unos resultados espectaculares. No solo protege a los soldados, también a decenas de infraestructuras en todo el país. Una tecnología nacional de la que estar orgullosos.