Quantcast

Castilla la mancha

La pareja del asesinato de Chiloeches amplió un día más su reserva en el hostal tras cometer el crimen

La Guardia Civil localizó en el hostal de Daganzo donde se hospedaba la pareja de detenidos por el triple crimen de Chiloeches drogas, una decena de relojes y una cadena de oro de la madre

La pareja del asesinato de Chiloeches amplió un día más su reserva en el hostal tras cometer el crimen
La pareja del asesinato de Chiloeches amplió un día más su reserva en el hostal tras cometer el crimen Susana Crespo

Fernando P.S., el presunto autor del triple asesinato de Chiloeches (Guadalajara), pensaba que no le podían relacionar con el crimen tras matar a la familia Villar Fernández. Para ocultarse de las autoridades se hospedó junto a su pareja Wendy B.G.M. en un hostal de Daganzo. Después de hacerse público el suceso decidieron ampliar a más días su reserva inicial hasta la mañana del lunes. La Guardia Civil detuvo en ese establecimiento a los dos y localizó en su habitación drogas, armas blancas, joyas y relojes, que pertenecían a las víctimas de la urbanización de Medina Azahara. Se llevaron de la casa una decena de relojes y una cadena de oro de la madre.

La cronología del atroz triple asesinato de Chiloeches no concuerda entre la declaración de los testigos y las hipótesis de la Guardia Civil. A pesar de ello, las pruebas son irrefutables y ubican a los tres en un asalto planificado para robar en el chalet de Ángel y Elvira, de 52 años.

Así, la diligencia que terminó de cercar a los implicados fue el registro de su habitación en el Hostal Cervantes, ubicado en la localidad de Daganzo (Madrid). Fernando y Wendy tuvieron que recorrer 35 kilómetros, poco más de media hora, para encontrar en ese establecimiento su refugio.

La idea que tenían era pasar la noche y después marcharse el domingo. Sin embargo, esa mañana advirtieron a los empleados que pensaban quedarse más en la habitación hasta el lunes. Cambiaron su aspecto físico y dejaron pagadas las dos noches con dinero en efectivo. Para registrarse en el local utilizaron el DNI de Wendy. Así llegaron los agentes hasta Daganzo porque estaban en busca y captura. La mujer, en un primer momento, aseguró que no tenía nada que ver y que su novio fue el asesino.

Esas horas después del crimen, las 36 que estuvieron en libertad, las vivieron con absoluta normalidad, tomando incluso chocolate en una terraza de Daganzo mientras comprobaban las noticias que iban saliendo sobre el triple asesinato de Chiloeches. Pensaban que con el incendio quedaría oculto el homicidio. A eso de las 18:30 horas del domingo, varios dispositivos de la Guardia Civil dieron con ellos y fueron detenidos en el hostal.

Fernando amenazó con un destornillador a los guardias civiles

En su habitación los agentes encontraron las piezas claves. Una maleta tipo trolley con restos de sangre. Este equipaje pertenecía y fue sustraído de la vivienda de las víctimas. En su interior había joyas y relojes que se llevaron de la casa de la familia que asesinaron. Los funcionarios también incautaron armas blancas y sustancias estupefacientes.

No fue un arresto fácil. Fernando se revolvió contra los funcionarios y sacó un destornillador. Se vivieron momentos de tensión pero finalmente acabó siendo reducido. Su pareja no opuso ninguna resistencia. La tercera pata del asesinato de Chiloeches, David M.A., fue detenido horas antes en su casa familiar de Medina Azahara, vivía a unos pocos metros de la familia.

La Guardia Civil continuará las diligencias de este suceso para aclarar si hay más personas implicadas. No se descarta que a lo largo de las mismas, algunos de los familiares de los detenidos acaben imputados por el delito de encubrimiento. Lo que sí se ha descartado, a raíz de las pesquisas que se han practicado hasta el momento, es que el exnovio de Laura tuviera algo que ver en el suceso.

El botín: una decena de relojes y una cadena de la madre

El trío ha confesado que visitaron a la joven varias veces a la casa en Medina Azahara. Tuvieron varias conversaciones donde, de forma inocente, confesó que sus padres tenían dinero, relojes y poca seguridad en la vivienda. También les dio la pista de que sus padres trabajaban de noche y dejaban una puerta abierta por la que accedieron a la vivienda.

La información que tenían de la familia unida a las facilidades que les otorgaba David, ya que vivía en Medina Azahara, fueron claves para desarrollar su estratégico plan. La reconstrucción de los hechos sugirió una gran violencia sobre las víctimas. Utilizaron dos machetes o cuchillos de gran longitud.

Después de asesinar a los tres miembros de la familia se llevaron del dormitorio una decena de relojes de oro, una cadena de oro y dinero en efectivo. Precisamente, parte de esos billetes los utilizaron para pagar la habitación del hostal.

La escena del triple crimen en Chiloeches
La escena del triple crimen en Chiloeches

El padre tenía más de una decena de puñaladas. Era un hombre de gran envergadura que opuso resistencia al asalto. Los agentes sospechan que la idea era no matar a Laura pero fueron reconocidos y por eso acabaron con su vida también.

Las piezas que faltan del crimen de Chiloeches

El círculo de los arrestados estaba en la localidad cercana de Pioz, que está a poco más de diez minutos en carretera del lugar donde ocurrió el asesinato. Las primeras pesquisas ya clarificaron que los autores conocían tanto a la hija del matrimonio como a su expareja.

Se hacían conocer en Pioz como la 'Mafia' y era muy común su implicación en hechos delictivos. Sus perfiles estaban relacionados con el trapicheo de sustancias estupefacientes y con los robos. No tenían antecedentes tan graves como de los que ahora se les acusa.

La Guardia Civil practicó registros en una vivienda que okupaban en Pioz y la casa de David en Medina Azahara. Fernando y David ya se encuentran en prisión provisional sin fianza. La novia del primero ha quedado en libertad con la obligación de comparecencia ante el juzgado los días 1 y 15 de cada mes; prohibición de salida del territorio nacional; y retirada del pasaporte.

A estos tres jóvenes se les imputa de manera provisional como presuntos autores de tres delitos de asesinato, delito de robo con violencia en casa habitada y delito de incendio. Desde el TSJ de Castilla-La Mancha se advierte que la instrucción está "en una fase muy inicial". La investigación de Chiloeches sigue bajo secreto de sumario. Una circunstancia que afecta a la totalidad de las diligencias que se están practicando.

Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.