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Buscan más pistas de Juana Canal en Ávila: rastrean la zona rural donde aparecieron sus restos

La Policía Nacional y la Guardia Civil están rastreando la zona de Ávila donde apareció el cráneo y un fémur de Juana Canal que desapareció hace 19 años en Madrid

La Policía busca sangre en una casa 19 años después para aclarar el asesinato de una mujer
Juana Canal, la mujer desaparecida hace 19 años en Madrid.

Más de 60 agentes de la Guardia Civil de Ávila y de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la Policía Nacional buscan pistas en Ávila sobre Juana Canal, la mujer que desapareció hace 19 años de Madrid. La batida se prolongará varios días en el margen del camino que suve al pueblo de Navalacruz, según informan fuentes de la investigación a Vozpópuli.

La desaparición de Juana Canal, de 38 años, se produjo el 22 de febrero de 2003 en el número 2 de la Calle Boldano en el barrio de Pueblo NuevoVivía en ese inmueble con Sergio, el mayor de sus hijos, y Jesús, el que por entonces era su pareja. Precisamente Sergio no pasó la noche en casa. Dejó en su casa la cartera, dinero y todas sus pertenencias lo que levantó las sospechas de los agentes de Ciudad Lineal que recogieron la denuncia.

Una carta de su expareja

Cuando llegó el joven a su domicilio encontró una carta escrita por el novio de su madre. "Tu madre y yo hemos tenido una fuerte discusión y ha salido corriendo. He salido en su busca, pero no la he encontrado". Desde ese momento se denunció la desaparición de Juana pero no se encontraron pista.

La desaparición de Juana Canal estuvo aletargada hasta que a finales del 2019 un senderista localizó en Ávila unos restos óseos en una zona rural. En concreto era un fémur y un cráneo que fueron analizados por el Servicio de Criminalista de la Guardia Civil.

Se prolongará varios días

En ese punto es donde están trabajando desde este lunes los efectivos de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado. "Están desplegados todos los medios disponibles y se va a prolongar durante varios días", según informan fuentes de la investigación.

La zona donde buscan es en el margen de camino que sube al pueblo a unos cinco kilómetros del pueblo de Navalacruz (Ávila). Se da la circunstancia de que el principal sospechoso del crimen, su expareja, tiene una finca familiar en un paraje cercano. Juana Canal no tenía ninguna vinculación con Ávila.

A finales de septiembre, la Policía Nacional realizó una inspección a fondo en el domicilio donde convivía hace 19 años con su pareja y sus dos hijos en la calle Boladano de Madrid. Los investigadores sospechan que el homicidio de esta mujer ocurrió en esta casa, según han informado fuentes policiales a Vozpópuli.

En el registro de la vivienda de Juana Canal no se encontraron pistas relevantes ya que el paso del tiempo y las reformas de la casa pudieron ocultar lo que en realidad pasó. Ahora en Ávila buscan más restos de su cuerpo y pistas sobre donde estuvo oculto durante casi dos décadas.

Su expareja tenía una herida en un brazo

Uno de los puntos complicados del caso es que su pareja denunció dos días de la desaparición a Juana Canal por un delito de malos tratos. Los agentes que revisaron el caso constataron que tenía una herida sangrante en uno de sus brazos por lo que pasó a ser el principal sospechoso, según informan fuentes policiales.

A pesar de esta circunstancia, los años pasaron y el caso no tuvo avances lo que ha sido un auténtico quebradero de cabeza para los agentes de la Unidad Central de Delincuencia Especializada y Violenta de la Policía Nacional. Los encargados de la investigación fueron desde el primer momento los policías de la Brigada Central de Investigación de Delitos contra las Personas.

Prescribe en cinco meses

El abogado que representa a la familia de Juana, Juan Manuel Medina, ha ensalzado para Vozpópuli el "trabajo excepcional" de la Policía Nacional y de la Comandancia de la Guardia Civil de Ávila. "Intentan recuperar los indicios suficientes para sacar adelante un asunto que no se he cerrado", analiza Medina. Y es que el "paso del tiempo" ha supuesto un "efecto devastador" pero la familia aun tiene la "esperanza de que se puedan esclarecer los hechos".

Una vez más el tiempo corre contra los investigadores ya que el caso prescribirá en cinco meses. En concreto en febrero de 2023 se cumplirán dos años del homicidio. Ese es el principal motivo por el cual están cercando todos los vestigios y poder dar una respuesta de cómo fue el asesinato y quién fue el asesino de Juana.

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