La Audiencia admite una denuncia contra Gustavo Petro por el rapto de un periodista

El magistrado de la Audiencia Nacional Joaquín Gadea ha admitido a trámite una denuncia presentada en este órgano contra Gustavo Petro, el candidato izquierdista en las elecciones presidenciales de Colombia. El instructor acepta investigar la autoría del grupo guerrillero al que perteneció Petro (Movimiento 19 de abril) en el secuestro del periodista español Fernando González Pacheco.

El instructor explica que la denuncia -que se presentó por delitos de lesa humanidad y genocidio- debe ser admitida "a los solos efectos" de ofrecer a los familiares de este periodista la posibilidad de querellarse. Esto es así porque Fiscalía se ha opuesto a la admisión a trámite de la denuncia alegando falta de jurisdicción en los tribunales españoles; de manera que la causa solo puede prosperar si se persona algún familiar del comunicador, que falleció en 2014.

Del mismo modo explica en su auto que es "importante" corroborar la nacionalidad española de González Pacheco ya que, de confirmarse el extremo contrario, la jurisdicción española no tendría potestad para investigar a Petro, de nacionalidad colombiana. La Audiencia Nacional también recurre al país sudamericano en aras a comprobar que el candidato que se jugará su victoria en una segunda vuelta electoral, no goce de estatuto de amnistiado o indultado o que no haya sido investigado por estos hechos.

Movimiento 19 de Abril

Aunque el juez admite a trámite únicamente lo relativo al secuestro de este periodista español, la denuncia recoge una serie de hechos que habría cometido la guerrilla a la que perteneció Petro. El instructor indica al respecto que solo puede investigar lo relativo al presunto secuestro de González Pacheco, ya que el resto de hechos denunciados ocurrieron en Colombia y afectan a ciudadanos de allí.

La denuncia en cuestión relata que Petro fue integrante del Movimiento 19 de abril; una guerrilla fundada tras la derrota del candidato de la Alianza Nacional Popular Gustavo Rojas Pinilla, en los comicios de 1970. Al hilo indica que entre la década de 1970 y 1980 “emplearon de manera sistemática e indiscriminada el secuestro de personas, así como la tortura y el asesinato intencional con el objetivo de destruir a quienes consideraban su 'enemigo'”.

Entre las víctimas de este grupo (integrado por miembros de otras organizaciones terroristas como las FARC) se encontraban oponentes políticos, periodistas, empresarios, personal diplomático y altos funcionarios del país. El denunciante explica que Petro jamás ha rendido cuentas ante la Justicia de su país por estos hechos que, según detalla, engloban torturas, ejecuciones y miles de desapariciones.

También relata que el candidato a presidir Colombia no ha sido condenado ni tampoco amnistiado por su pasado e exguerrillero, lo cual abriría la puerta a facilitar una investigación por estos hechos. Esta información la facilitó al denunciante la Directora de Justicia Transaccional de Colombia, la cual respondió a su solicitud de información que Gustavo Petro goza estatus de "desmovilizado".

En las agendas de Villarejo

El denunciante explica además que la guerrilla desarrolló durante esas décadas "patrones de criminalidad" tales como ataques a poblaciones, con explosivos, desaparición y desplazamiento forzado, masacres, piratería aérea, reclutamiento de niños, secuestros, torturas, uso de minas antipersona y violencia sexual y de género. Recuerda, al respecto que Petro no fue un mero integrante sino que aparece "como uno de los máximos responsables" de esta guerrilla urbana que cesó sus actividades a comienzos de la década de los noventa.

Se da la circunstancia de Petro fue objetivo del comisario jubilado José Manuel Villarejo, con motivo de un viaje a Colombia en julio de 2017. Tal y como informó este diario, el policía (que también está investigado en la Audiencia Nacional por todos sus espionajes privados) anotó en su agenda una alusión a Petro. A él se refirió como como exalcalde de Bogotá, cargo que ocupó Petro entre abril de 2014 y diciembre de 2015.