María Guardiola ha tenido que hacer borrón y cuenta nueva después de vivir su fin de semana más duro desde que lidera el PP de Extremadura. La dirigente regional, que en un principio recibió el aval de Génova para romper con Vox, vio cómo se iba quedando sola en sus ataques a los de Abascal y regresó a su casa de la toma de posesión de Ayuso el viernes "muy tocada" tras ser recibida con hostilidad por sus compañeros de partido y llegó a plantear a la dirección nacional su renuncia: "Si el problema soy yo, me voy".
Según explican a Vozpópuli fuentes bien situadas en el PP extremeño y muy próximas a Guardiola, la dirigente popular mantuvo, a lo largo del fin de semana, varias conversaciones con la cúpula del partido a nivel nacional y también habló con Feijóo, con el que coincidió el viernes en el acto institucional que volvió a proclamar a Ayuso presidenta de la Comunidad de Madrid.
Tal y como informó este medio ayer, Guardiola pasó "un mal rato" en la Real Casa de Correos, donde algún compañero de partido -entre los que se encontraban Alfonso Fernández Mañueco y Carlos Mazón- estuvo "especialmente antipático". Apenas 48 horas después, llegaría la entrevista de Isabel Díaz Ayuso en El Mundo en la que la líder madrileña apostaba abiertamente por los pactos con Vox.
Amago de renuncia
Ese 'cóctel' de reproches, tanto públicos como privados, provocó que María Guardiola convocara primero un Comité Ejecutivo y la Junta Directiva regional para el martes y, después, que trasladara a Génova y a su círculo más cercano la posibilidad de renunciar: "Si el problema soy yo, me voy".
Según las fuentes consultadas, la respuesta que recibió la dirigente extremeña fue de "apoyo y confianza", tanto de su equipo más próximo como de la dirección nacional del partido. Desde la ejecutiva de Feijóo, eso sí, se le animó a cesar en sus ataques hacia Vox y buscar un entendimiento "imprescindible" con los de Abascal, tal y como ella misma calificó ese posible acuerdo en su carta enviada el domingo por la noche a los cargos y militantes regionales.
En esa misma misiva, en la que también cancelaba el Comité Ejecutivo y la Junta Directiva convocados previamente, Guardiola habló de "evitar interpretaciones malintencionadas o distracciones que nos aparten del camino de llevar a Feijóo a La Moncloa". Un mensaje que también repitió ayer ante los medios y que desde el PP de Extremadura vinculan a Génova: "los autores de ese discurso viven en Madrid".
La intervención de Génova
Las mismas fuentes apuntan a la vicesecretaría de Organización que dirige Miguel Tellado -uno de los colaboradores más próximos de Feijóo- como la responsable de la nueva estrategia a aplicar por Guardiola en Extremadura: "Tanto ellos como nosotros hemos asumido que Vox tiene que entrar en el gobierno tras el revuelo que se ha organizado y había que cambiar el discurso".
Esa hoja de ruta, trazada desde el entorno más próximo a Feijóo, se está aplicando ya en el PP de Extremadura, donde se espera poder llegar a un acuerdo con Vox pese a las "duras negociaciones" que se prevén: "Ellos están ahora en una posición de fuerza y van a exigir más que antes".
Críticas a Ayuso
Los cargos del PP extremeño contactados con Vozpópuli rechazan cualquier tipo de encontronazo o discrepancia con Alberto Núñez Feijóo, aunque sí se muestran más críticos con la actitud y el discurso protagonizados por Isabel Díaz Ayuso en los últimos días.
Ayuso, que reclamaba autonomía en la etapa de Pablo Casado, se ha movido ahora para que la dirección nacional someta a una dirección regional del partido
Así, estos dirigentes reprochan a la presidenta de la Comunidad que advirtiera a Feijóo de la necesidad de pactar con Vox en Extremadura y que insistiera en esa idea públicamente en su entrevista en El Mundo: "Ella, que reclamaba autonomía en la etapa de Pablo Casado, se ha movido ahora para que la dirección nacional someta a una dirección regional del partido".
