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Relato del atentado mortal en Algeciras: "Sujetó la catana y alzó la mirada al cielo"

El magistrado vincula al atacante con el salafismo yihadista y le atribuye "actos de terror" con los atentados de este miércoles en dos iglesias en los que asesinó a un sacristán e hirió a varias personas

Detalle de la Iglesia de San Isidro en Algeciras
Detalle de la Iglesia de San Isidro en Algeciras

"Sujeta la catana con ambas manos y alzando la mirada al cielo y gritando unas palabras en árabe entre las que se escucha la palabra 'Allah' le asesta una última estocada mortal", reza el juez Joaquín Gadea. El magistrado de la Audiencia Nacional que investiga los atentados de Algeciras relata de esta forma los hechos ocurridos en la tarde noche de este miércoles y por los que se le atribuye a Yassin K, delito de asesinato y lesiones con fines terroristas.

El auto del magistrado sobre quien recayó la investigación hace un relato pormenorizado del atentado que tuvo lugar este miércoles en Algeciras y que se cobró la vida de un sacristán. Según se desprende del escrito, al que ha tenido acceso Vozpópuli, todo comenzó cuando el individuo, de nacionalidad marroquí, se acercó a la Iglesia de San Isidro, donde comenzó "una discusión" por motivos religiosos.

"Manifestó de forma vehemente que la única religión que hay que seguir es la religión islámica", reza el juez. En ese momento abandonó el lugar profiriendo mensajes en árabe y, a las 19.40 horas, volvió a dicha parroquia. "Desde el interior de la iglesia los allí presentes escuchan como alguien ubicado en el exterior de la iglesia profiere gritos en árabe. El sacerdote encargado de la misma baja del púlpito para comprobar lo que estaba ocurriendo, instante en el que el investigado portando en su mano un machete de grandes dimensiones y de forma súbita agrede al sacerdote causándole lesiones de gran gravedad", relata.

"Una estocada mortal"

Cometido el primer ataque Yassin K abandonó el lugar de los hechos y se dirigió al centro religioso Virgen de Palma, ubicado a unos 200 metros de la iglesia anterior. En dicho lugar se encontró con el sacristán de esta iglesia, Diego Valencia, que estaba abandonando el centro por una puerta trasera. Según el relato del juez, fue en ese momento cuando el investigado le abordó y le apuñaló hasta causarle la muerte.

"Yassin K inica varias acometidas sobre el mismo, causándole unas primeras lesiones, si bien el ahora fallecido intenta huir, dirigiéndose a la plaza Alta de esa ciudad. Una vez que se encuentra en el centro de esa plaza es alcanzado por el atacante quien una vez que le tiene en el suelo, sujeta la catana con ambas manos y alzando la mirada al cielo y gritando unas palabras en árabe entre las que se escucha la palabra 'allah' le asesta una última estocada mortal", indica.

Imagen del suceso en Algeciras / EFEEFE

El magistrado, que se ciñe al relato policial de los hechos, precisa que tras asesinar al sacristán de la iglesia, se dirigió a la conocida como Ermita Europa, ubicado en la misma plaza e intentó acceder a su interior, aunque no consiguió su objetivo al ser detenido por la Policía Local. En ese mismo momento los agentes le redujeron y le trasladaron a un centro médico de Algeciras para recibir asistencia facultativa. El acusado no puso resistencia pero en ese tiempo y pese al caos sembrado en la ciudad, fue profiriendo gritos de corte yihadista.

Salafismo yihadista

Por ese motivo, el magistrado del Juzgado Central de Instrucción número 6 le atribuye indiciariamente delito de asesinato con fines de terrorismo (artículo 573 del Código Penal). De hecho, el juez que asumió este caso por encontrarse en funciones de guardia precisa que se apreció una "voluntad terrorista" en su actuación. Al respecto sostiene que el objetivo de este ciudadano marroquí fue el de alterar la paz pública "mediante la ejecución de actos de terror".

El auto se redactó apenas horas después de la cadena de ataques que provocó el caos entre los ciudadanos de Algeciras y en el mismo se daba luz verde a los agentes a registrar su domicilio. La Audiencia Nacional, que asumió esta investigación por tratarse de materia de terrorismo, autorizó la incautación de dispositivos informáticos y cualquier otro tipo de material y documentación que ayude ahora a los investigadores a indagar los motivos que le llevaron a asesinar a una persona y a herir de gravedad a otras cuatro (incluido el primer sacerdote al que atacó con el cuchillo).

Pendiente de expulsión a Marruecos

Hasta el momento los investigadores han podido acreditar que Yassin Kanza, magrebí de 25 años, llevaba desde junio de 2022 pendiente de ser expulsado a Marruecos por encontrarse en España en situación irregular. Residía en una vivienda de Algeciras de escasas dimensiones junto a otros compañeros, ubicada en la calle Sevilla, donde la Policía ha localizado propaganda vinculada al salafismo yihadista.

De acuerdo a las primeras pesquisas, el individuo se habría radicalizado en los últimos meses tras el consumo de esta propaganda. Además se investigan los presuntos problemas mentales que habría sufrido en el pasado. Todos esos elementos apuntan a que se trata de un actor solitario, sin apoyo ni una infraestructura desarrollada para perpetrar los ataques. De momento permanecerá bajo custodia policial hasta este lunes, cuando pase a disposición judicial ante el magistrado al frente de las pesquisas.

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    X_X_X

    Oye, por alguna razón nunca es un suizo o un colombiano. Siempre es un moro.