El expresident de la Generalitat Francisco Camps ha asegurado este lunes que no encargó "a nadie ninguna cosa extraña" tras el accidente de metro de 2006, en el que murieron 43 personas, y ha afirmado que el objetivo del Consell fue siempre "estar junto a las familias" y esclarecer lo ocurrido. Al inicio de su comparecencia en la comisión de Les Corts que investiga el accidente de metro, Camps ha dado el "sentido pésame" a las familias de las víctimas, algunas de ellas presentes en la sala, que, según ha dicho, "siempre han sido las personas más importantes" en todo lo que el Consell hizo "desde el primer minuto", tal y como recoge la agencia Efe.
"Ofrecí ayuda a cambio de nada y a título personal", ha subrayado Juan Cotino
Camps ha defendido además el papel después del accidente del exconsejero Juan Cotino, quien "dio un paso adelante" para colaborar con las familias, ya que "humanamente" contaba con experiencia en "tragedias de todo tipo" por haber sido director general de la Policía y delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana.
Por su parte, Cotino, expresidente de Les Corts, ha asegurado poco antes que visitó a aquellos familiares de las víctimas que se lo pidieron, a quienes ofreció ayuda "a cambio de nada" y que lo hizo a título "personal" y porque le dio la gana. En este sentido, ha manifestado que su intención fue "ayudar en la medida de lo posible, con más acierto o menos".
Tras asegurar que no le mandaba el entonces presidente de la Generalitat, Francisco Camps, ha explicado que dio su tarjeta personal a todas las familias que pudo la noche del accidente y al día siguiente, y se reunió con aquellas que le llamaron, que ha cifrado en unas 35, en distintos pueblos. Esa, ha destacado, era su "única finalidad" en esas visitas, que nadie le había encargado hacer, sino que las realizó a título personal, porque le daba la gana y "en conciencia", y que luego informó de ellas a la comisión interdepartamental creada por el Consell y al propio presidente.
"No se cometió ningún error"
El exconsejero, a quien no le consta que se cometiera "ningún error", ha pedido "perdón" a las familias "por posiblemente no haberlas atendido mejor" y a aquellas personas a las que haya podido ofender, pero ha insistido en que lo que hizo fue "con plena libertad de conciencia y sabiendo que tenía que hacerlo". Ha asegurado que sí ha estado en la Plaza de la Virgen con las víctimas, pues las dos primeras veces que se reunieron allí, a la salida de los funerales en la catedral, se acercó a saludar a personas que conocía, pero no volvió porque había quienes quizá "no estaban cómodos" con su presencia.
"La intención mía ha sido siempre hacerlo lo mejor que he sabido", ha declarado Cotino
"La intención mía ha sido siempre hacerlo lo mejor que he sabido", ha asegurado Cotino, quien ha defendido que la voluntad era "actuar bien" y ha asegurado que no ha usado información privilegiada nunca en su vida. Ha indicado que no necesitaba que nadie le informara de cómo era cada familia, pues se lo decían las propias familias cuando hablaba con ellas, y ha indicado que cuando se planteaban cuestiones en las que podía actuar la administración, él las trasladaba al vicepresidente de la Generalitat, Víctor Campos.
Ha señalado que la inmensa mayoría de personas las visitaba a ultima hora del día o los fines de semana, y ha insistido en que no iba a ofrecerles nada porque "nada tenía que ofrecerles".
Cotino ha dicho no saber si se prepararon o no las comparecencias de la anterior comisión de investigación porque no intervino en nada ni dio su opinión en nada, y ha indicado que desde el punto de vista de las víctimas, "nunca se hace suficiente justicia".