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Volkswagen contempla un aumento de la producción en Navarra del 30% en 2022

La dirección acuerda con los representantes de la plantilla superar de nuevo las 300.000 unidades fabricadas

Una plantta de ensamblaje de Volkswagen
Una plantta de ensamblaje de Volkswagen

Ha sido uno de los años más complicados para la planta navarra de Volkswagen. Un ejercicio 2021 marcado por las continuas paradas de producción por la falta de suministros de micro chips, que ha hecho que el cierre del año suponga una ligera caída del volumen final hasta las 237.000 unidades (frente a las casi 243.000 del año anterior).

Pero las previsiones para el próximo 2022 realizadas por la dirección de la fábrica de Volkswagen Navarra y que ha acordado con los representantes de los trabajadores establecen un incremento de la producción de casi un 30% para superar de nuevo las 300.000 unidades fabricadas con una jornada de 215 días. Un acuerdo que establece una serie de "garantías salariales y laborales" para la plantilla en el caso de que se deban producir nueves parones en la producción debido a la escasez de componentes.

El presidente del comité de empresa de Volkswagen Navarra, Alfredo Morales, ha destacado que es "un calendario optimista", con unas producciones altas dadas las circunstancias y que solo esperan y desean que se cumpla. En este sentido, ha indicado que la previsión es que los clientes van a comprar los vehículos fabricados en la planta, aunque ha señalado que puede darse la situación de que haya falta de semiconductores como ha sucedido este año.

"Lo positivo de este calendario es que está avalado por una previsión de producción y eso, a su vez, viene tras una cantidad importante de pedidos que tenemos", ha destacado. Morales ha explicado que las vacaciones, que normalmente se sitúan en los meses de julio y agosto, se han establecido en el mes de junio, ya que se necesita un tiempo de inactividad para poder adecuar las instalaciones. "Si se necesita para adaptar las instalaciones para el futuro pues bienvenido sea", ha añadido.

Por otro lado, ha apuntado que el acuerdo de calendario establece "una serie de garantías si las cosas van como este año", en el que se han acumulado varios cierres debido a la escasez de semiconductores. "Si tenemos que cerrar días acordaremos un nuevo ERTE que establece una serie de condiciones y garantías tanto salariales como laborales para la plantilla", ha subrayado.

Primer ejercicio completo con tres modelos

Un notable incremento de producción previsto tras haber comenzado el pasado mes de noviembre la producción de un nuevo modelo, el Taigo, con el que por primera vez en la larga historia de la planta produce tres modelos al mismo tiempo que va a permitir ese incremento de producción. Porque tanto el T-Cross como el nuevo Taigo son modelos de uno de los segmentos más demandados, el de los SUV de carácter urbano.

Buenas expectativas por tanto para Volkswagen Navarra a la espera de dar el paso definitivo al comienzo de la era eléctrica, toda vez que la fábrica ya tiene adjudicada por parte de la multinacional alemana la futura producción de turismos pequeños con esta tecnología a partir de 2025, lo que sin duda asegura el futuro de la planta de Volkswagen Navarra y el futuro de miles de empleos.

Y es que con la aprobación del PERTE para todo lo que implica el desarrollo del coche eléctrico con ayudas públicas por valor de 3.000 millones de euros, Volkswagen Navarra se posiciona como una de las fábricas españolas que van a poder recibir estas subvenciones que le van a permitir desarrollar las inversiones necesarias para llegar a ese horizonte 2025 con los deberes hechos para la producción de sus primeros turismos eléctricos.

Y sin dejar de lado que Volkswagen tiene previsto establecer seis gigafábricas en Europa para cubrir la creciente demanda de células de batería dentro del grupo, y estudia la construcción de una de ellas en España. Una decisión que llegará en los primeros meses de 2022 y que de recabar en nuestro país supondría todo un espaldarazo de la automovilística alemana hacia las fábricas españolas.

En su fase inicial, la primera de ellas ubicada en Alemania tendría una capacidad anual de 20 gigavatios hora y prevista para que se duplique a 40 gigavatios hora en una fase posterior. En total, se han destinado 2.000 millones de euros para la construcción y el funcionamiento de la gigafactoría previo al comienzo de su producción.

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