Economía

Hacienda aplica un nuevo impuesto a 23.000 ricos y baja el IRPF a las rentas inferiores a 21.000 euros

Montero presenta su paquete de medidas fiscales sin Podemos. Plantea una batería de rebajas a rentas bajas, pymes y autónomos, que acompaña de subidas por 5.649 millones a rentas del capital, multinacionales y grandes fortunas

La ministra de Hacienda, María Jesús Montero.

El Gobierno rebajará el IRPF a rentas bajas, pero se niega a deflactar la tarifa como muchas comunidades del PP y también ya del PSOE plantean. Así lo ha anunciado la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en rueda de prensa en su Ministerio, en la que ha avanzado una reducción de rendimientos del trabajo para rentas bajas y de retenciones de los autónomos en el IRPF, además de rebajas para pymes en Sociedades y del IVA de productos de higiene femenina por un total de 2.505 millones. Todo esto se acompaña de subidas por 5.649 millones en el impuesto a grandes fortunas, de un alza de rentas del capital en el IRPF y de un incremento de Sociedades para grandes empresas. Según Montero, el Gobierno no deflacta el IRPF porque es regresivo.

En el IRPF, ha anunciado un incremento de la reducción por rendimientos del trabajo sin tocar tramos ni tipos, y ha dicho que van a ampliar así el "beneficio fiscal" que tienen bajas y medidas. Su aplicación pasa de rentas brutas de 18.000 euros a 21.000 euros, una "cifra no elegida al azar", ya que cree que se acerca al salario medio y afecta al 50% de los trabajadores. Esto supondrá un ahorro de 1.881 millones de euros al año, desde 2023 en las retenciones, con impacto pleno en 2024. Montero ha puesto de ejemplo un ahorro de 746 euros para el que gana 18.000 euros. Y ha contrapuesto esto con los "sólo 23 euros" que a su juicio supone la deflactación de Andalucía.

Esto se acompaña de un alza del límite exento del pago del IRPF a 15.000 euros desde los 14.000 euros.

A su vez, los autónomos tendrán una reducción adicional de 5 puntos porcentuales en sus retenciones, de lo que se beneficiarán 560.000, y un incremento del 7% de sus gastos deducibles, lo que supondrá 116 millones de ahorro, del que casi 1 millón de autónomos se beneficiarán de una medida transitoria. Asimismo, Hacienda vuelve a prorrogar los límites de los módulos, lo que le cuesta 124 millones.

Las pymes que facturen menos de un millón de euros, por su parte, verán reducido su tipo nominal del 25% al 23%. Esto afecta a 407.000 empresas, que se ahorrarán 292 millones, lo que se prevé estructural.

Habrá también una rebaja del IVA a productos de higiene femenina que se presupone del 10% al 4% aunque Montero no la ha concretado. Se calculaba que cuesta 30 millones. Queda descartada de momento la reducción del IVA de alimentos básicos del 10% al 4% como pescado y carne que propone el PP y que Yolanda Díaz también reclama ahora.

Montero ha contrapuesto el "populismo tributario frente a pedagogía fiscal". A su juicio, las políticas que anuncia "son reconocibles y coherentes con la política fiscal del Gobierno" y permiten sostener el Estado de bienestar. "Hoy nuestro sistema fiscal es más justo y objetivo que al inicio de la legislatura". "Queremos combatir los efectos de la inflación que se deriva de la guerra en Ucrania", ha dicho, y ha aludido a las rebajas fiscales de la electricidad. Todo esto, cuando el Gobierno preparaba una batería de subidas fiscales que empezó a compensar con rebajas esta semana cuando vio que el PP le ganaba el relato de la batalla fiscal.

Las subidas

Del lado de las subidas, se incrementan las rentas del capital superiores a 200.000 euros del 26% al 27% y las de más de 300.000, al 28%, con un aumento de dos puntos, lo que recaudará 204 millones y se prevé estructural.

En el Impuesto sobre Sociedades, se limita un 50% las compensación de pérdidas de filiales de grupos consolidados en 2023, lo que podrá recuperarse en 2024. Según Montero, recaudará 2.439 millones y afectará a 3.609 empresas, el 0,2%.

El impuesto a grandes fortunas será temporal para 2023 y 2024 y afectará a una riqueza neta superior a los 3 millones de euros -con las mismas reglas que el Impuesto de Patrimonio, restando 300.000 euros de vivienda habitual-, con tres tramos: entre 3 y 5 millones, un 1,7%; entre 5 y 10, un 2,1%, y por encima de 10, al 3,5%. Según la ministra, "esta legislación evitará la doble imposición porque la cuota que se abone en las comunidades será totalmente deducible". El potencial recaudatorio es de 1.500 millones y los contribuyentes afectados, 23.000, el 0,1%.

Acto insólito

"El PSOE y los partidos que le sustentan", ha dicho Montero que plantean este paquete y los Presupuestos, en alusión a Podemos y como guiño a ERC y sus socios.

Esta presentación de la ministra de Hacienda ha sido acto insólito en la comunicación tradicional de los Presupuestos, en la que el Ministerio de Hacienda siempre ha dado cuenta de las novedades fiscales en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros que los aprueba, lo que amplía cuando entran en el Congreso. Sólo hubo una excepción en 2018, cuando Pedro Sánchez y Pablo Iglesias se hicieron una foto en Moncloa con los fallidos Presupuestos de 2019. Pero Hacienda nunca había dado cuenta antes de la rueda del Consejo de su paquete fiscal. En un acto en el que no ha estado Podemos en el atril.