Los expertos que asesoran a Yolanda Díaz para la subida del SMI recomiendan que suba a hasta 1.082 euros en 2023. Así lo plantea el informe que han presentado este lunes, en el que ofrecen una horquilla que va desde los 1.046 euros a los 1.082, pero advierten de que deberá revisarse en seis meses teniendo en cuenta la inflación, y avisan de que sus cálculos se ha hecho con el salario medio de 2022, que en 2023 será superior.
Ahora se abre la negociación con los agentes sociales, a los que se ha convocado este miércoles. Se da por descontada la negativa de CEOE a las subidas, mientras los sindicatos presionarán para que se llegue a los 1.100 euros.
El IPC de noviembre que el INE ha publicado, del 6,8%, confirma que las pensiones subirán un 8,5%, ya que cierra el círculo para cerrar la cifra del IPC medio que va a utilizar el Gobierno en la subida de las pensiones de 2023, para la que se tiene en cuenta la media entre diciembre de 2021 y noviembre de 2022, según recoge la Ley 21/2021, del 28 de diciembre. Pero es que es también una de las referencias que se van a seguir para la subida del SMI del año que viene, y la que más peso va a tener en la negociación.
Esto implica una subida del SMI al entorno de 1.080, 1.085 euros desde los 1.000 vigentes que ahora mismo Nadia Calviño ve excesiva y Yolanda Díaz busca, pero que los sindicatos, que plantean incluso llegar a los 1.100 euros, dan por descontada. "Si no transige Economía, pediremos a Pedro Sánchez que intervenga", comentan fuentes de una central sindical a Vozpópuli.
La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo venía advirtiendo desde finales de agosto que la inflación media se situaría este año entre un 7% y un 8%, y ha recordado que para la subida del SMI debe tenerse en cuenta, pero también la participación de los salarios en la renta nacional, la productividad y la situación económica del país. Y ha subrayado este último elemento.
Sin embargo, el IPC es una referencia que presiona a Díaz, que se ha colocado del lado de lo sindicatos en la pugna por la negociación de la subida de salarios en convenio. De hecho, cálculos sindicales estiman que el alza del SMI a 1.080 euros implicaría que sólo suponga el 60% del salario medio al final de la legislatura, el compromiso del Gobierno. Esto se debe a que el salario medio sobre el que se hicieron los cálculos de la subida del SMI, datos de 2018, ahora desfasados, lo llevaría a 1.049 euros.
UGT ya venía exigiendo una subida a 1.100 euros, a lo que se ha sumado CCOO, ha avisado de que el alza debe absorber toda la inflación de este año, que ha llegado a, 10,8% en julio.
En cualquier caso, para este sindicato es clave que se precise lo que supone el 60% del salario medio. Lo que Sordo ha añadido es que el nuevo SMI debe estar "más cerca de los 1.100 euros que de los 1.049 mensuales".
Cierre 'in extremis'
Díaz convocó el 2 de septiembre al comité de expertos sobre la subida del SMI como primer paso para la negociación de la subida de 2023. Estos expertos proponían hasta ahora un alza de 1.049 euros, el 60% del salario medio que prometió el Gobierno. Se preveía empezar la negociación, que finalmente se ha llevado al último momento.
Los sabios tenían dos cometidos principales sobre los que el Ejecutivo ya estaba muy orientado: actualizar qué se entiende por salario medio. Y determinar cómo debe trasladarse el impacto de la inflación en el alza.
El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, propuso incluso en julio activar una segunda subida del SMI este año ante la espiral inflacionaria, planteamiento que entonces secundó Díaz, pero que luego desechó.
