Un juez condena por primera vez a BBVA tras 'colocar' acciones de Abengoa a un cliente

El Juzgado de Primera Instancia número 56 de Madrid ha condenado a BBVA a devolver 49.912 euros más costas a un cliente tras considerar que el banco vendió acciones de Abengoa, "incumpliendo absolutamente con las más elementales normas sobre comercialización de productos financieros y el análisis de la conveniencia e idoneidad".

La venta de acciones se realizó en 2015 por internet después de que el cliente recibiera "las noticias del producto en la oficina", tal y como dicta la sentencia a la que ha tenido acceso Vozpópuli.

El cliente, actualmente jubilado, era "un habitual a la oficina" y pensaba que estaba contratando "un producto seguro, rentable y sin riesgo por las indicaciones dadas por la entidad". La contratación del producto se realizó sin información concreta ni tríptico alguno.

Según la documentación presentada por el afectado, la entidad solo entregó las órdenes de compra y fue dirigido a la web tras conversar con personal del banco. Todo ello sin entrar a valorar si efectivamente en dichas órdenes de compra se informaba de manera comprensible de las características y riesgo de los títulos de Abengoa. Es por ello que BBVA comercializó estas acciones incumpliendo las normas sobre comercialización de productos financieros que señala el artículo 79 bis de la Ley de Mercado de Valores.  

La sentencia, que ha sido ganada por el despacho Yvancos Abogados, representa "un importante éxito en relación con las reclamaciones de las acciones de Abengoa, ya que abre las puertas a las reclamaciones de más perjudicados", señalan fuentes del bufete.

Fuentes de BBVA consultadas por este medio señalan que "en el proceso de compra de las acciones, que se llevó a cabo a través de la plataforma de banca por internet de BBVA, y por tanto sin intervención ni recomendación alguna por parte de los empleados de la entidad, se cumplieron todas las obligaciones de información y advertencias legalmente exigidas, al ser un procedimiento expresamente diseñado a tales efectos". 

Asimismo, defienden que el producto adquirido por el cliente son valores de renta variable, producto catalogado como no complejo a efectos de MIFID. "BBVA actuó como ejecutor de la orden de compra y por tanto, la mera ejecución no requiere de test de conveniencia ni de idoneidad", agregan.

La crisis 

Abengoa salió del Ibex 35 en noviembre de 2015 después de cayera más de un 70% el precio de su acción en dos días. La compañía andaluza pasó de valer algo más de 4.300 millones de euros a tan sólo 258 millones en sólo 14 meses, lo que supone una devaluación de sus títulos de un 95% en ese mismo periodo. 

En 2014 la agencia Fitch emitió un duro informe en el que puso en duda las cuentas y la deuda de la compañía. En el mercado se llegó a hablar de "ingeniería contable y falseamiento de cuentas". La compañía llegó a catalogarse como un chicharro (empresa con poco valor en Bolsa y alta volatilidad). La tensión en el mercado fue tal que la CNMV tuvo que parar la cotización de Abengoa para poder casar las órdenes de compra-venta.