Sabadell se moviliza para evitar la fianza de 1.500 millones en el juicio a los exdirectivos de la CAM

Durante hace unas horas, la alarma ha cundido en Banco Sabadell. Y es que en el auto de apertura del juicio oral para ocho exdirectivos de la antigua CAM (Caja del Mediterráneo), la juez Carmen Lamela incluyó a la entidad presidida por Josep Oliu (que controla la CAM desde 2012) entre los responsables civiles que tendrán que afrontar el pago "solidario" de la fianza. Es decir, que la titular del Juzgado Central de Instrucción Nº3 de Madrid obligaría a Sabadell a depositar buena parte de los 1.524,5 millones de euros reclamados en un plazo de 24 horas.

La entidad, que este miércoles lideraba las caídas de la banca española en Bolsa, ha reaccionado enviando un escrito de aclaración esta misma tarde a la Audiencia Nacional. Entre los argumentos esgrimidos por los equipos de Asesoría del banco, algunos empleados por la propia Fiscalía: "Banco Sabadell no es responsable; en todo caso sería un perjudicado de la administración desleal de los antiguos responsables", explican desde el banco, al tiempo que le cuestionan a la magistrada por los motivos que le han llevado a reclamar dicha cantidad, muy por encima de los beneficios de la entidad el pasado año.

"No acabamos de ver la responsabilidad civil subsidiaria del banco respecto de unas personas que administraron la entidad en 2010 y 2011", explican a este diario fuentes de la entidad, que recalcan que el propio fiscal les pide que se les indemnice por las pérdidas contables existentes en el balance de la CAM tras la absorción por parte de Sabadell.

Junto a Sabadell, ha sido nombrado responsable civil subsidiario la Fundación CAM, heredera de la obra social de la antigua caja de ahorros levantina. Además, la aseguradora Caser ha sido designada responsable civil directa. Entre éstas y los ocho exdirectivos acusados (entre ellos Roberto López Abad y María Dolores Amorós) tendrán que afrontar, el jueves como muy tarde, los 1.592.494.000 euros de fianza decretados por la jueza, si los escritos de aclaración no la convencen de lo contrario.