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Economía

Trinitario Casanova, contra las cuerdas: le acusan de desviar 10 millones de su constructora antes de ir a concurso

Trinitario Casanova, en Plaza de España (Madrid).

Trinitario Casanova, dueño de Grupo Baraka, conocido como 'el rey del pelotazo' por las fugaces y aparentemente exitosas operaciones que ha protagonizado durante este siglo en España, comprando y vendiendo activos inmobiliarios, afronta un nuevo frente judicial con graves acusaciones por parte de acreedores de la que fue una de sus empresas de construcción, Trabis Edificación Avanzada.

El grupo francés Corum, que gestiona activos valorados en 2.000 millones de euros y es el principal acreedor de Trabis, sostiene que Baraka orquestó una trama fraudulenta para desviar 10 millones de euros de su participada Trabis antes de ir a concurso, a mediados del pasado año, en perjuicio de los acreedores.

Así lo mantiene la compañía francesa en un escrito enviado al Juzgado Mercantil número 14 de Madrid por su representación legal, Cuatrecasas, al que ha tenido acceso Vozpópuli.

Cuatrecasas advierte que las irregularidades descritas "son de una gravedad tal que llama poderosamente la atención"

Grupo Baraka, con el que se puso en contacto este diario la pasada semana, niega los hechos y asegura que "todo es completamente falso".

Los abogados de la compañía francesa explican en su escrito al juzgado que el 5 de junio de 2018 Corum adquirió a la empresa de Trinitario Casanova unas fincas en Yecla (Murcia) por un precio de 14,1 millones de euros. Sin embargo, "apenas seis meses después de recibir tal ingente cantidad de efectivo, Trabis confiesa encontrarse en estado de insolvencia". 

Trabis Edificación Avanzada se acogió en diciembre de 2018 al artículo 5.bis de la Ley Concursal, artículo que permite a la empresa negociar con los acreedores un convenio durante tres meses (ampliable a cuatro) para evitar la declaración de concurso, impidiendo que un acreedor pueda instar el concurso. Cuatrecasas precisa en su escrito al juzgado que, tres meses después de cobrar esos 14 millones de euros, Trabis "ya había dejado de abonar las rentas de los arrendamientos".

¿Qué ocurrió entre el cobro de 14 millones de euros por parte de Trabis y la solicitud de preconcurso de acreedores? El bufete que representa a Corum advierte que Trabis repartió durante el ejercicio 2018 un dividendo a cuenta, por importe de 10 millones de euros, a favor de quienes en ese momento eran sus socios, Baraka CG y Barak GI.

Tras declararse en preconcurso, Trabis fue traspasada a una persona física y se desgajó de Grupo Baraka

Esa salida patrimonial por importe de 10 millones en concepto de dividendo a cuenta "constituye una salida fraudulenta del patrimonio de la concursada en contra de los intereses de sus acreedores", afirma el escrito de Cuatrecasas en representación de Corum.

Indicios

El despacho explica que existen tres indicios que revelan esa salida fraudulenta de Trabis. En primer lugar, el dividendo a cuenta es un pago anticipado a los socios de una compañía ante las expectativas de beneficios, por lo que no se entiende que poco después de repartir 10 millones en dividendos, Trabis se declarara en preconcurso.

En segundo lugar, Corum afirma que el motivo de la insolvencia de Trabis se debió a que la empresa financió ese dividendo de 10 millones con el pasivo corriente que ha dejado impagado a sus acreedores. "Ese y no otro, es el motivo de la insolvencia que revela Trabis en diciembre de 2018", subraya.

El grupo francés advierte que en las cuentas anuales de 2018 de Trabis, se indica que durante el mes de diciembre se había comunicado al juzgado la situación de insolvencia inminente, y que esa situación tenía su reflejo "en el fondo de maniobra negativo que presenta el balance de situación adjunto por importe de 10,9 millones de euros".

Grupo Baraka defiende que el auditor de sus cuentas de 2018 no vio irregularidad en el reparto del dividendo

Cuatrecasas recuerda en su escrito al juzgado que un fondo de maniobra negativo representa una situación de desequilibrio financiero en la que el activo corriente de una empresa es inferior a su pasivo corriente. "No hace falta un conocimiento profundo a nivel contable, basta poder comparar números, para ver que Trabis reparte como anticipo del resultado del ejercicio 10 millones de euros, cifra que coincide plenamente con el fondo de maniobra negativo que se acumula a final del mismo ejercicio 2018", dice.

En tercer lugar, Corum destaca los hechos ocurridos en Trabis una vez efectuado el reparto del dividendo, hechos que se sucedieron "de manera vertiginosa hacia un único resultado: que Baraka GI se deshiciera de Trabis tras haber cobrado el dividendo a cuenta obtenido fraudulentamente".

En su escrito al juzgado los abogados de Corum advierten que un mes después de acogerse al artículo 5.bis de la Ley Concursal, "Trabis es desgajada del Grupo Empresarial Baraka", pasando a ser propiedad de una persona física. 

En resumen, concluye Corum, "durante el ejercicio 2019 Grupo Empresarial Baraka, a través de la mercantil Trabis, ejecuta una trama para distraer nada menos que diez millones de euros", que se financió con la venta de los terrenos de Yecla, cuyo precio se destinó a "dividendos injustificados, derivando en una insolvencia grave de la propia Trabis". Las irregularidades descritas "son de una gravedad tal que llama poderosamente la atención".

Respuesta de Baraka

Grupo Baraka, a través de su departamento jurídico, sostiene en una consulta realizada por este diario que Trabis "informó en sus cuentas anuales sobre el dividendo" y que "el auditor externo aplicó procedimientos específicos que corroboraron que el dividendo cumplió con la legalidad y requisitos establecidos en la normativa".

La constructora Trabis fue condenada el pasado mes de octubre al pago de 1,24 millones a un antiguo socio

Baraka resalta que el auditor de sus cuentas -Evaluación y Control Auditores- afirma que se cumplieron "los requisitos establecidos en la Ley de Sociedades de Capital, confirmando como correcto este reparto y, en consecuencia, la imposibilidad de solicitar la restitución de los mismos".

El grupo de Trinitario Casanova ha advertido a este diario que las "meras acusaciones de determinadas entidades no tienen validez ni carácter de ciertas" y asegura que se trata de "represalias de estas entidades por haber sido demandadas por Trabis por el robo de mercancías valoradas en 3 millones de euros".

Sobre ese apunte del supuesto robo de mercancías valoradas en tres millones de euros, este diario ya publicó el pasado mes de octubre que Trabis Edificación Avanzada había reclamado una indemnización de 3 millones contra la empresa P14 Cimentaciones, con la que había firmado, en agosto de 2015, contrato de exclusividad para la fabricación, suministro y compraventa de pilotes prefabricados. 

Tras celebrarse juicio a principios de octubre del pasado año, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Yecla  condenó a la empresa que perteneció a Trinitario Casanova al pago de 1,24 millones de euros a la firma P14 Cimentaciones, por incumplimiento de contrato.

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