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Economía

La patronal, a Sánchez: antes que subir impuestos, hay que luchar contra la economía sumergida

Los presidente de CEOE y Cepyme, Juan Rosell (i) y Antonio Garamendi (d).

La Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) ha propuesto este martes al Gobierno de Pedro Sánchez un pacto para modernizar determinados aspectos del mercado laboral que, a su juicio, se han quedado anticuados. Entre los temas fundamentales sobre los que le ha llamado a actuar se encuentran la economía sumergida, la formación de los empleados y el absentismo injustificado.

En una rueda de prensa que se ha celebrado después de que la Junta Directiva de la CEOE ratificara el preacuerdo sobre la subida laboral alcanzado este lunes con los sindicatos, el representante de CEPYME, Antonio Garamendi, ha apelado a luchar contra la economía sumergida, el gran mal del tejido productivo español, que la CEOE calcula que podría representar hasta el 20% del PIB. En este sentido, ha defendido la idea de reforzar la lucha contra este fenómeno antes que realizar una subida de impuestos.

Durante su intervención, han rechazado la idea que sopesa el Gobierno, consistente en eliminar los topes de las bases máximas de las cotizaciones sociales para financiar las pensiones. "Restaría competitividad" y "aumentaría los gastos", ha apuntado Garamendi.

Modernización del mercado de trabajo

Antonio Garamendi y Juan Rosell -presidente de la CEOE- han apelado al Ejecutivo a alcanzar un pacto que sirva para actualizar el mercado de trabajo a la nueva era de la globalización y la digitalización. Para ello, han considerado fundamental la mejora de la formación de los empleados, lo que incrementaría la productividad de las empresas y la media salarial.

A este respecto, han citado una de las clausulas que incluye el pacto alcanzado con los sindicatos, que tratará de evitar los Expedientes de Regulación de Empleo en las empresas en dificultades económicas. Mediante este nuevo sistema, se reducirían las horas de trabajo a los empleados de sectores que, por la caída del negocio, deben disminuir la producción. A cambio, reciben formación en aspectos con un mayor valor añadido y el Estado paga una parte de su salario. "En Alemania, llegó a aplicarse en 2009 sobre 2 millones de trabajadores y tuvieron un crecimiento 'cero' del desempleo", ha asegurado Rosell.

Este sistema implica una dotación presupuestaria para su implantación, pero Rosell lo ha defendido: "siempre es mejor pagar formación que subsidio".

Los representantes de la CEOE han asegurado que el acuerdo que alcanzaron con los sindicatos ha sido aprobado por unanimidad en su Junta Directiva, si bien han reconocido que se ha producido un largo debate, con veinte turnos de palabra, en el que las organizaciones sectoriales y autonómicas han expuesto sus puntos de vista. El pacto contempla un incremento del 2% fijo de las retribuciones, así como el 1% variable en las empresas que se encuentren en situación de beneficios y en la que sus empleados cumplan con unos determinados parámetros de productividad.

Asimismo, los empresarios se han comprometido a incrementar los salarios más bajos hasta 2020 hasta los 14.000 euros anuales. Es decir, hasta fijar los mínimos en 1.000 euros en 14 pagas.

Ahora bien, Rosell ha apelado a ser comprensivo con la situación de las pequeñas empresas, que son las que todavía no han superado del todo la crisis económica. "El 90% de las empresas que facturan más 1.000 millones ha salido de la crisis; de las que facturan más de 10 millones ha salido el 70%; y las que facturan menos de 300.000 euros todavía están saliendo. Dejemos a estas empresas tiempo para poder ponerse en velocidad de crucero”, ha expuesto.

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