Publicado: 01/06/2012 04:00
El Rey Juan Carlos no estará solo en la visita que realizará la semana que viene a Brasil y Chile, que supondrá retomar sus actividades en el exterior tras la polémica cacería en Botsuana del pasado abril. Aunque no hay confirmación oficial por parte de las empresas, ni desde el Ministerio de Exteriores (ni por parte de la Casa Real), acompañarán al monarca algunos de los principales ejecutivos de compañías del Ibex 35, además del ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, cuya presencia ya estaba anunciada.
Entre esos ejecutivos, que viajarán por separado, estarán el presidente de Santander, Emilio Botín; su homólogo en Telefónica, César Alierta; el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán; el de Repsol, Antonio Brufau; Borja Prado (Endesa), que sólo acompañará a la delegación en Chile (ya tenía programada una visita allí); Antonio Vázquez (Iberia) y Antoni Llardén (Enagás).
También acudirá el presidente de la patronal CEOE, Juan Rosell, cuyo jefe de gabinete, Narciso Casado, ya se encuentra en Brasil preparando la visita. Los detalles del viaje deberían cerrarse hoy en un briefing en el Palacio de la Zarzuela.
Otras empresas del Ibex también tendrán representación, aunque no mandarán a sus primeros espadas. Es el caso de BBVA y de Gas Natural. La gasista estará representada por Sergio Aranda, su director general para Latinoamérica, y por Bruno Armbrust, el presidente de su filial en Brasil.
Según informó el pasado martes el Ministerio de Exteriores, el monarca viajará junto con García-Margallo el próximo domingo y el lunes se desplazarán hasta Chile, donde permanecerán hasta el próximo miércoles.
El programa del viaje todavía no está cerrado, aunque la delegación española tiene la intención de entrevistarse con la presidenta brasileña, Dilma Rousseff. El país presenta un gran potencial en el sector de las infraestructuras.
El objetivo de la expedición es reforzar los lazos con estos dos socios estratégicos de España y preparar la Cumbre Iberoamericana que tendrá lugar en Cádiz el próximo noviembre. Será el primer viaje de estas características desde la expropiación de YPF a Repsol por parte del Gobierno argentino. Y también será la primera visita oficial del rey al exterior desde que el pasado 14 de abril el monarca fue sometido una operación en la que se le implantó una prótesis de cadera, tras ser repatriado de urgencia de Botsuana, donde se encontraba de cacería en un viaje privado.
El incidente fue un mazazo para la popularidad de la Casa Real y forzó al monarca a disculparse públicamente, en un gesto sin precedentes.
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