La reina Isabel II, de 95 años, está delicada de salud. En tan solo una semana ha tenido que cancelar ya dos actos.
El último ha sido la asistencia que tenía prevista en la cumbre del clima COP26 que comienza este fin de semana en Glasgow (Escocia), después de que los médicos le aconsejaran guardar descanso, según anunció este martes el Palacio de Buckingham. Sin embargo, no se ha especificado el problema de salud.
El comunicado señala que la soberana británica "ha decidido con pesar que no viajará a Glasgow" el próximo lunes, como tenía previsto, para presidir la ceremonia de recepción de los líderes mundiales convocados a la reunión climática.
"Su Majestad se siente decepcionada por no poder asistir a la recepción", indica la nota del Palacio, pero trasladará un mensaje a los mandatarios y delegados en la COP26 a través de un discurso grabado previamente en vídeo.
Anteriormente, tuvo que suspender también la visita que tenía programada a Irlanda del Norte, y se ha limitado desde entonces a llevar a cabo "tareas ligeras" en el castillo de Windsor.
La reina Isabel de Inglaterra pasó una noche ingresada en el hospital
La soberana británica permaneció ingresada en un hospital la noche del pasado miércoles 20 de octubre para ser sometida a "exámenes preliminares" por problemas de salud aunque no se dieron más detalles.
Al día siguiente salió del centro médico, que es el mismo en el que estuvo hospitalizado su marido, Felipe de Edimburgo, antes de fallecer el pasado mes de abril a los 99 años, en el hospital privado King Edward VII, en el centro de Londres.
Tras siete días de descanso por recomendación de los médicos, este martes había retomado su agenda y atendió sus primeras audiencias virtuales desde su residencia del castillo de Windsor.
La reina Isabel II deberá ir acompañada a todos los actos
Debido al delicado estado de salud y a que ya ha tenido que cancelar dos actos, a partir de ahora la reina de Inglaterra deberá ir siempre acompañada por un miembro senior de la familia real británica para que pueda sustituirla en caso de que la soberana se encuentre indispuesta.
De este modo se asegura que no se vea afectada la agenda de actos públicos y no se tenga que suspenderse ninguno, según publica 'The Telegraph'.
Este acompañante será el 'sustituto' o 'repuesto' de la monarca en caso de que esta se encuentre enferma o surja algún imprevisto de última hora, como ocurrió hace una semana.
Además, al ir acompañada este miembro podrá prestarle “compañía o apoyo”, según detalla el rotativo británico.
Este papel de acompañante recaerá sobre los hijos de la reina Isabel, entre los que se encuentran el heredero, el príncipe Carlos de Inglaterra; Andrés de York, la princesa Ana de Inglaterra y Eduardo de Wessex; o de sus nueras, Sofía de Wessex o Camila Parquer Bowles.
Sin embargo, al príncipe Andrés no se le espera debido al escándalo en el que está envuelto. Será interrogado el 14 de julio en EEUU por abuso sexual en el caso Epstein.
Los duques de Wessex será quizás en los que recaiga más este papel ya que han aparecido últimamente en muchos actos oficiales tras la marcha de Harry (Enrique) y Meghan Markle a Estados Unidos.