Publicado: 27/12/2015 04:00
A la manera de la NBA, la Liga Endesa, con buen criterio, ha decidido enfrentar a sus transatlánticos en fechas navideñas, cuando más al alcance de la familia está el reunirse en torno al baloncesto. El Barcelona Lassa visita la pista del Real Madrid en el primer Clásico liguero de la temporada y la sensación de que no llega en buen momento para los de Xavi Pascual acucia a un equipo culé repleto de bajas.
El técnico barcelonista espera recuperar al base checo Tomas Satoransky, que no jugó en la última jornada ante el Bilbao con un esguince en el tobillo, pero es más que probable que pierda por el camino a Carlos Arroyo (sobrecarga en el gemelo de la pierna izquierda) y a Alex Abrines (esguince en el dedo gordo del pie derecho), caídos en combate frente a los vascos.
Será un encuentro especial para el capitán azulgrana Juan Carlos Navarro, que disputará su clásico número noventa. Una pesadilla para el Real Madrid en Clásicos pretéritos, el de Sant Feliu de Llobregat espera completar una actuación acorde a su leyenda, aunque su deriva física le ha hecho perder peso en la rotación del equipo catalán.
Los madrileños, por su parte, han convertido su pabellón en una fortaleza. Tras perder en la primera jornada frente al intratable Valencia Basket, han encadenado once victorias consecutivas en ACB, lejos de la irregularidad continental que casi les cuesta un disgusto en la Euroliga.
El mejor ataque se enfrenta a la mejor defensa, en un atractivo choque de estilos
El Barça llega a Madrid tras sumar cinco triunfos consecutivos y empatado en balance con el equipo de Pablo Laso, a una victoria de los invictos taronjas, que por primera vez en mucho tiempo han dejado el Clásico como una pelea por el segundo puesto provisional de la liga regular.
Los precedentes son claramente blancos: en la pasada campaña, los merengues dominaron con seis victorias y una sola derrota. Además, desde la 2009-10 el conjunto azulgrana no es capaz de superar al Real Madrid a domicilio en partidos de la liga regular. La última victoria de los de Xavi Pascual llegó el 27 de diciembre de 2009, justo hace seis años, con los capitalinos aún jugando en Vistalegre.
La guinda estadística a la previa la pone el hecho de que se enfrentan el mejor ataque de la competición (las huestes de Laso, con 92 puntos por partido) contra la defensa más impenetrable (el FC Barcelona sólo concede 67,6 tantos de media). Por si fuera poco, en la pintura Ante Tomic y Gustavo Ayón protagonizarán un duelo de titanes, siendo los jugadores más valorados de ambas escuadras.
Los resultados hablan y las estadísticas lo ratifican: por eficacia y eficiencia, el Clásico de la pelota naranja es uno de los mejores partidos de baloncesto que se pueden ver en Europa. Todo un seguro de espectáculo y diversión.
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