Arcilla blanca: el mejor ingrediente para una piel sana

La arcilla blanca fue descubierta en la montaña de Gao-Ling en Caolín, región de China y nombre con el que también se conoce a este ingrediente con grandes beneficios para la piel. Se trata de un polvo blanco y brillante con abundantes minerales como el silicio y la caolinita que, además de ser un gran limpiador y servir para desintoxicar la epidermis, tiene multitud de propiedades curativas entre las que destaca su alto poder antibacteriano y cicatrizante, y su ayuda para regular el pH intestinal.

En un principio se empleaba con propósitos terapéuticos, pero sus magníficas propiedades hicieron extensivo su uso también a nivel cosmético y para el cuidado de la piel. Lo que hace al caolín o arcilla blanca tan especial es su alto contenido en dióxido de sílice, ingrediente muy popular en muchos productos de belleza, ya que favorece la generación de colágeno, fundamental para lograr brillo y elasticidad.

“La forma más común en la que suele usarse es en forma de mascarilla facial, con el objetivo de purificar profundamente los poros, descongestionar y tensar, además de proteger e iluminar el rostro gracias a antioxidantes como las vitaminas C y E”, explica Ángeles Girón, licenciada en biología y técnico de investigación en el laboratorio de Nezeni Cosmetics.

Un limpiador natural

La arcilla blanca, uno de los ingredientes más usados en la cosmética natural y casera, elimina la suciedad, toxinas e impurezas de los poros, causante de problemas como las espinillas y los brotes acneicos. Además, previene los puntos negros y tiene la particularidad de que limpia la piel sin resecar ni dejarla tirante ni opaca, por eso se puede utilizar en la tez seca y sensible.

A diferencia de la arcilla verde -que además de silicio contiene aluminio, hierro, calcio, magnesio, sodio y potasio, entre otros minerales-, de efecto más purificante, la blanca es ideal para pieles secas y mates. 

Su poder para absorber la grasa, sobre todo las partículas de grasa adicional de la superficie de la piel, ayudan a equilibrar la epidermis y mantener a raya los puntos negros y las obstrucciones que generan problemas de acné. Al eliminar el exceso de sebo, también ayuda a reducir el exceso de brillos en la tez. Lo mejor de todo es que solo controla el exceso de producción de sebo en la capa superficial y no afecta a su nivel de grasa natural ni al manto lipídico.

El caolín posee también cualidades calmantes que pueden aliviar y suavizar la piel irritada, ya sea por erupciones cutáneas, por someterse a tratamientos agresivos o por, por ejemplo, la picadura de un insecto. Sus propiedades curativas calman cualquier enrojecimiento o erupción.

Exfolia y unifica

Aplicar una mascarilla o una crema basada en arcilla blanca al menos una vez por semana favorece la eliminación incluso de las cantidades más diminutas de suciedad con una suave exfoliación. Esas pequeñas partículas contaminantes y bacterianas son retiradas de la capa superficial y promueve la regeneración de las células cutáneas, brindando un aspecto saludable y brillante a la piel apagada y cansada, controlando los problemas de acné sin resecar ni causar enrojecimiento o irritación.

También mejora la circulación sanguínea y remineraliza las células cutáneas, que quedan estimuladas y lucen de manera uniforme, lo que se traduce en una apariencia más luminosa y radiante con un tono más homogéneo.

Remedio contra la psoriasis

Se trata de uno de los remedios más utilizados para calmar la psoriasis (una afección cutánea que provoca enrojecimiento, escamas plateadas e irritación de la piel) y la dermatitis. Su forma de aplicación es como una cataplasma que provoca un efecto descongestionante que alivia la sensación de picor o descamación de la piel. Su poder logra refrescar la zona sin resecar, algo que sería totalmente contraproducente.

Adiós al cabello graso

Otra de las aplicaciones que tiene la arcilla blanca tiene mucho que ver con el cuero cabelludo. Aplicada con una infusión de manzanilla y unas gotitas de aceite de árbol de té (que puede encontrarse en cualquier herbolario o supermercado) ayuda a absorber el exceso de sebo en el cabello y elimina las impurezas que lo hacen parecer graso y encrespado. Se puede aplicar en forma de mascarilla sobre el pelo y añadirle también otros aceites esenciales como la lavanda.

Contra las piernas cansadas

No es sólo un buen ingrediente para la piel del rostro, también lo es para el resto del cuerpo. Al ser muy nutritiva e hidratante puede usarse como antiestrías (mejor si se mezcla con aceite de argán) y también es efectiva para combatir la celulitis y reducir su efecto. Tiene cualidades descongestionantes y un pH ácido con propiedades vasoconstrictoras, por lo que es buena también contra las piernas cansadas e incluso para disminuir las varices. En muchos geles de ducha ya se incluye la arcilla blanca y suelen ser buenos para hidratar pieles más secas. 

Buen protector gástrico

Su poder limpiador también funciona si se ingiere y no solo en forma de mascarillas o cremas. Ayuda a limpiar el organismo de metales pesados y es un buen aliado para absorber bacterias y virus que pueden estar en el sistema digestivo. Incluso es un buen remedio para evitar la sensación de hinchazón y los gases que pueden causar molestias incómodas, ya que regula el pH y la acidez estomacal. Al tener que ingerirlo para estas utilidades, siempre se debe consultar con un profesional o un especialista que te aconseje cómo y cuándo hacerlo.

Desodorante natural 

Esta es quizá una de las aplicaciones más desconocidas de la arcilla blanca. Es perfecta para tratar los incómodos problemas de sudoración excesiva y los malos olores causados por el sudor. Gracias a su textura en polvo y a los minerales de su composición, su eficacia está totalmente probada si se aplica en manos, pies o axilas para unos resultados favorables y naturales.

Otros tipos de arcilla

La arcilla roja, que debe su color a su alto contenido en óxidos de hierro y cobre, tiene un gran poder astringente y absorbente sobre la piel. Como ingrediente natural actúa regenerando la piel, estimula la cicatrización y ayuda a suavizar marcas y cicatrices siendo también adecuada para pieles mixtas y con acné. Por su parte, la de color verdoso es ideal para pieles más grasas por su poder para eliminar impurezas y limpiar en profundidad la piel.