La Copa del Mundo en Brasil acapara miradas. Mientras unos no pierden de vista el balón, otros se detienen en el malestar social; las protestas, la miseria y el hampa de un país que acusa las graves diferencias sociales y ahora saca pecho como anfitrión de uno de los mundiales más caros de la historia. Lo cierto es que el tiempo corre; y mientras unos hacen sus quinielas, otros se preguntan qué hay detrás de algo tan complejo –y a la vez sencillo- como un deporte en el que 22 hombres de pantalón corto consiguen hacer saltar a un país –a veces dos o tres, incluso un continente entero- con sólo marcar un gol.
Un grupo de escritores, artistas, cineastas y periodistas aprovechan la ocasión para buscar algunas respuestas. En Madrid, la librería La Central acoge algo parecido a un mundial en paralelo. Se trata de ¡A jugar a la calle!, un evento organizado en conjunto con Revista Líbero que busca aportar una mirada más reflexiva sobre lo que este mundial supone. Pases de partidos, debates así como encuentros entre escritores, periodistas y sociólogos –también editores y por supuesto lectores- con la intención de descifrar, antes y después de algunos de los juegos,” las componentes históricas, políticas y por supuesto deportivas que se esconden detrás de cada partido”.