Otro problema para Bankia: el Supremo, cerca de resolver sobre el ERE de 2013

Bankia se encuentra a las puertas de resolver (está por ver si a su favor) otro frente judicial abierto a raíz de la nacionalización de 2012. En concreto, se trata del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) llevado a cabo en 2013, como parte del paquete de exigencias firmadas con Bruselas, y que significó una reducción de la plantilla del banco de más de 4.500 personas. El ERE, a pesar de estar formalmente finalizado ya, podría deparar sorpresas, toda vez que alrededor de un centenar de demandas por despidos improcedentes están a la espera de sentencia en el Tribunal Supremo.

En Bankia hubo 539 despidos forzosos, de los que unos 250 presentaron demandas de nulidad o improcedencia

Y es que una parte significativa de los despedidos de Bankia fueron forzosos. En concreto, unos 539, de los que alrededor de 250 han presentado demandas de nulidad o improcedencia, y llevan años agrupados en un colectivo que combativo con los actuales gestores de la entidad. Se quejan de que el banco llevó a cabo estos despidos forzosos cuando a la vez se negaron hasta 1.200 despidos voluntarios reclamados por otros tantos trabajadores deseosos de acogerse al programa de bajas voluntarias abierto por Bankia con el ERE.

Fuentes próximas al caso asegura a Vozpópuli que en los últimos días se ha reunido el Tribunal Supremo para tratar los primeros recursos de casación llegados al mismo relacionados con los despidos forzosos de Bankia, y que la decisión se publicará las próximas semanas. Además, hay una causa en el Constitucional, presentada por el sindicato CGT, en relación a los trabajadores que se presentaron al ERE voluntarios y fueron rechazados. La proximidad de las primeras sentencias (que podrían sentar jurisprudencia) ha hecho que los jueces de instancias inferiores lleven semanas paralizando los procesos a la espera de una resolución que les fije un criterio. Y es que la casuística de los diversos casos y la interpretación particular de cada magistrado han provocado resultados distintos para un mismo asunto.

"Prácticamente todas las sentencias de primera y segunda instancia de fuera de Madrid y Valencia las estamos ganando; y en cambio estamos perdiendo las de estas dos comunidades"

"En el TS hay ahora mismo alrededor de un centenar de casos", explica Jesús, uno de los demandantes y miembro de la plataforma de afectados por el ERE de Bankia. "Prácticamente todas las sentencias de primera y segunda instancia de fuera de Madrid y Valencia las estamos ganando; y en cambio estamos perdiendo las de estas dos comunidades. En Canarias, por ejemplo, se han ganado 12 de las 13 demandas. En Madrid se ganaron el 85% de casos en primera instancia, pero luego en segunda instancia se han perdido el 95%", señala.

Los demandantes alegan entre otras cosas que se forzaron los despidos (habiendo otros voluntarios a la espera) porque la entidad optó por reducir puestos de directores de oficina y otros empleados con salarios más altos. Además, esgrimen que en muchos casos la entidad no justificó adecuadamente las causas por las que precisamente éstos trabajadores habían de acogerse al ERE.

"En la carta de despido se aludía al rescate de 19.000 millones para justificar el despido, pero esa causa no explica por qué me escogieron a mí y no a los voluntarios", argumenta Roberto, uno de los afectados por los despidos forzosos de Bankia. Empleados como Jesús critican también que a pesar de que en su momento se anunciaron un mínimo de seis ofertas por trabajador en la Bolsa de Empleo creada a raíz del ERE, ésta en la práctica no ha funcionado. "A mí no me han hecho ni una oferta", asegura.

Críticas a los sindicatos

"Durante el ERE ha habido muchas irregularidades. En mi caso, por ejemplo, el despido se basó en una evaluación que nunca me hicieron", explica Alicia, empleada de Caja Madrid y Bankia durante más de 30 años. "Si tan malo era mi rendimiento según decía ese informe, me podían haber echado antes, para no haber durado tanto en la entidad", añade, al tiempo que incide en que en su opinión se despidieron a perfiles de trabajadores "que cobraban mucho".

Más allá de las críticas encendidas a Goirigolzarri y el resto de responsables de la actual Bankia, el colectivo de afectados por el ERE cargan también contra los sindicatos presentes en el banco, a los que acusan de no haber protegido sus intereses, sino los suyos propios. "Un día antes de la una huelga en defensa de todos los trabajadores, firmaron el acuerdo, que incluía a forzosos y que por tanto nos echaba a la calle. Nos engañaron y luego han cobrado por el ERE", denuncia Alicia, una antigua directora de oficina, para quien sindicatos y la propia entidad alcanzaron un acuerdo al margen de los intereses de los despedidos.