En Garoña quieren que reabra la central nuclear y en Villar de Cañas que se construya, de una vez, el basurero nuclear. Así que todos (o casi todos) a votar al PP, garante de estos proyectos. Pero, ¿qué pasa en Puertollano, donde el actual Gobierno ha dejado caer Elcogás? Pues que los electores municipales se han cargado al PP y han optado por el PSOE. También en Mieres, municipio del carbón cabreado con Rajoy, el partido de Pedro Sánchez se ha hecho con el bastón de mando.

El pleno del Consejo de Seguridad Nuclear del 26 de febrero, a propuesta del presidente Fernando Marti, decidió fulminar por sorpresa a Inmaculada Córdoba, jefa de servicio de Garoña durante 20 años, y a Alfredo Mozas, inspector residente. El relevo se produce en un momento muy delicado, con la central parada pero preparándose para reabrir en línea con los deseos del Gobierno. La maniobra de Marti persigue colocar en la planta a dos personas de confianza para que no entorpezcan el proceso.