Toda España parece rendida ante Rosalía. ¿Toda? No, una pequeña aldea de escépticos resiste al zafarrancho mediático, empeñados en que se está exagerando
Dueño de la voz más rota, acaso cuarteada por las salinas de San Fernando o las de la vida, José Monge Cruz, Camarón de la Isla, sigue alimentando el alma de payos y gitanos.
Haciendo un juego de palabras, podríamos definir a Kiko Veneno como el más sevillano de los sevillanos no nacidos en Sevilla. Haciendo alarde de esa gracia tan propia del sur, llena de ironía y pensamiento y voz afiladas, son ya más de treinta años los que lleva grabando bajo su nombre, desde aquel lejano Seré mecánico por ti, y muchos más si contamos su trabajo con los nunca olvidados Veneno.