La familia de María Belén Cortés, la educadora social asesinada el pasado domingo en un piso de cumplimiento de medidas judiciales, se ha pronunciado por primera vez. Lo ha hecho a través de un comunidado de sus abogados en el que aseguran que la familia "seguirá adelante en su lucha para que su pérdida no sea una más en las estadísticas". Quieren que el trágico asesinato de esta mujer de 35 años "no quede en el olvido y sirva como una llamada de atención para toda la sociedad".
"No podemos permitir que el dolor de su familia y allegados sea en vano. Debemos transformar la indignación en acción, el luto en conciencia, y la tragedia en prevención", exclaman en el comunicado remitido a los medios de comunicación, a los que agradecen "la sensibilidad, el respeto y la cobertura brindada al caso". Sin embargo, piden "responsabilidad" para "que no haya juicios paralelos ni especulaciones que entorpezcan la labor de la Justicia".
El Juzgado de Menores número 1 de Badajoz instruye la causa por delitos de homicidio, robo con violencia y contra la seguridad vial contra los tres menores que fueron detenidos tras el crimen de Belén. Los tres investigados, dos chicos de 14 y 15 años y una chica de 17, fueron arrestados por la Policía Nacional después de huir del lugar de los hechos robando el coche de la propia víctima. Según la investigación, la golpearon y estrangularon con un cinturón. El juez decretó para ellos su internamiento en un centro de menores en régimen cerrado.
Ahora, la familia de Belén reclama que se deje a "los profesionales, los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, y las instituciones competentes hagan su trabajo con la serenidad y el rigor que este caso merece", ya que "sólo a través de la verdad y del debido proceso lograremos justicia". Ese sería para ellos el "mayor homenaje" que se puede rendir a la educadora, "trabajar juntos para que ninguna otra familia tenga que atravesar esta pesadilla". "Solo a través de la verdad y el debido proceso lograremos justicia", recalcan.
Los familiares y abogados de Belén agracecen "especialmente a los profesionales de Cruz Roja que en la noche de los hechos dieron apoyo a la familia, a los agentes del Cuerpo Nacional de Policía de la Comisaria de Badajoz y Mérida, Instituto de Medicina Legal de Badajoz y demás instituciones, sin olvidar en ningún momento a los compañeros de Belén, por su apoyo, compromiso y humanidad en este proceso". Por último, destacan que el nombre de Belén "seguirá vivo como un símbolo de lo que no debe de volver a ocurrir". "Que su memoria sea la semilla de un cambio real", concluyen.
