El ajuste sanitario hasta 2014 supondrá cerca de 7.000 millones, un 5,4% del PIB

Los ajustes que se vienen planteando desde el Ministerio de Sanidad desde hace meses han provocado que sean los propios médicos, enfermeros o gestores del sector sanitario los que intenten buscar la mejor forma de ahorrar costes manteniendo la sostenibilidad de los hospitales y del propio Sistema Nacional de Salud (SNS). Con éste motivo han hecho públicas esta semana una vez más sus opiniones sobre qué es lo importante preservar para poder seguir siendo eficaces en la gestión clínica. 

Si a principios de semana eran los enfermeros quienes alertaban de su complicada situación, este viernes diferentes gestores y asesores sanitarios han explicado por qué defienden que el actual sistema como se conoce actualmente pueda ser un legado para las próximas generaciones. "Últimamente parece que la culpa del despilfarro la tiene Sanidad. El médico para curar a un paciente también tiene que exigirse ser eficiente en sus costes, aunque la gestión clínica tiene poco que ver con la privatización de la sanidad. Tenemos que seguir insistiendo en que el Pacto por la Sostenibilidad del SNS siga existiendo, y siga siendo viable y sostenible", decía Javier Font, representante nacional de Médicos de Hospitales en la sede de la Organización Médica Colegial (OMC). 

"El médico además de curar al paciente tiene que lograr hacerlo a bajo coste. Nuestro sistema necesita ciertas reformas estructurales para ser sostenible"

Bajo el título "El hospital del siglo XXI" diferentes profesionales explicaban que el sistema necesita reformas estructurales que deben ser consensuadas. Hace años, el médico era quien decidía el material que se compraba, y todas sus necesidades eran cubiertas sin rechistar, aunque en ocasiones no se hubiera demostrado que las inversiones en maquinaria o tecnología eran la mejor opción. El cambio fue complejo, pero ahora además de curar hay que lograr hacerlo a bajo coste, y la gestión tiene una amplia base en el conocimiento científico. 

En ese sentido se movía el discurso de Luis Oteo, de Desarrollo Directivo y Gestión de Servicios Sanitarios del Instituto de Salud Carlos III de Madrid, quien informaba de que en los últimos dos meses 15 comisiones de sanidad de todos los ámbitos han estado manteniendo reuniones para ver cómo se afronta el cambio de las variables del SNS, que "ahora tiene elementos de crisis estructural severa". "Ya en 2005 se alertaba de que nuestro sistema sin ciertas reformas estructurales iba a ser insostenible. Y todo está relacionado con la situación económica actual. Por ejemplo, según estimaciones publicadas en The New York Times, en 2021 si la economía crece un punto interanual nuestras rentas serán las mismas que aquellas que teníamos en 2008. Por cada punto de ajuste del PIB que hace el Gobierno en los presupuestos la economía se contrae 7 décimas. El ajuste sanitario hasta 2014 es de cerca de 7.000 millones, un 5,4% del PIB que recaerá principalmente en las Comunidades Autónomas", comentaba. 

En su opinión, no se producirá crecimiento sostenible desde las políticas públicas, de manera que los responsables del sector tendrán que buscar soluciones de manera interna, contrarrestando así el escenario contractivo que se está proponiendo externamente. 

Un responsable del Carlos III advierte de que el crecimiento sostenible ni vendrá de las políticas públicas, de manera que los afectados están tratando de buscar soluciones internamente

Otro de los argumentos expuestos en la jornada era la necesidad de un cambio del sistema actual hacia uno de concentración territorial de recursos, "algo más parecido a lo que hizo Londres con su reforma sanitaria en los 90", decía Jerónimo Navas, gerente del Hospital Vall d´Hebrón de Barcelona. "El hospital del futuro no es un ente que aparece de repente sino que se va construyendo día a día. Si queremos que éste se posicione y que los recursos los gestiones el propio centro y no se haga desde fuera, hay que hacer un cambio en la distribución de recursos. Nuestro conseller -Boi Ruiz- quiere que tengamos autonomía en la gestión, pero es una autonomía que como tal no existe. Y si lo intentas, lo que no puede ser es que te llame el conseller y te diga que con esta libertad de contratación que te han dado tus costes laborales no pueden ser inferiores a los de centros concertados", criticaba. 

Mientras que desde Sanidad no se concreten medidas acordadas para llevar a cabo ese casi recién firmado Pacto por la Sostenibilidad del SNS, los diferentes profesionales del sector siguen mantiendo reuniones y elaborando propuestas para poder ofrecer la mejor alternativa posible a los ajustes planteados por el Ejecutivo.