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Política

El PSOE navarro teme una venganza de Podemos si fracasa la investidura de Sánchez

La Coordinadora de Izquierda Unida de Navarra, Marisa de Simón; la jefa del Ejecutivo en funciones y líder de Geroa Bai, Uxue Barkos y la secretaria general de PSN, María Chivite

En estos tiempos frenéticos de la política española todo aquello que parece imposible puede mutar en posible. Y viceversa. Así, de manera tan difusa, puede resumirse cómo está la situación política en Navarra. Porque la presidencia de la socialista María Chivite, que parece estar hecha, también corre peligro. En este caso, como una derivada más de las negociaciones entre PSOE y Podemos sobre la investidura (acaso fallida) de Pedro Sánchez. No por casualidad, las fuerzas políticas navarras prefirieron demorar la investidura autonómica hasta después de la nacional. 

Lo cierto es que el terremoto nacional de las izquierdas puede tener sus réplicas en las autonomías. En Navarra existe el peligro de que ocurra como en La Rioja: es decir, que Podemos eche por tierra las expectativas de gobernar del PSOE. Al menos, ese temor existe en filas socialistas, donde consideran que puede haber una venganza de los podemitas si finalmente se consuma el fracaso de PSOE y Podemos en el Congreso de los Diputados. 

Más consejerías... y la decisión de las bases

"La falta de acuerdo entre Sánchez y Iglesias puede afectar a Navarra, aunque desde Podemos nos dicen que eso no va a ocurrir", afirma un cargo socialista a este diario. "Si no hay pacto en el Congreso, aquí Podemos puede elevar sus peticiones de consejerías propias, como ha hecho con los ministerios en el Gobierno, y también existe la posibilidad de que sus bases, enfadadas por lo que ocurra en Madrid, tumben nuestro acuerdo", agrega con una preocupación que tal vez sea impostada.
Porque en estos tiempos se lleva la impostura. Y porque en Navarra todos los partidos dan por hecho que Chivite, la candidata del PSOE, logrará con facilidad los apoyos que necesita: los votos a favor de Geroa Bai, Podemos e IU, así como la abstención de Bildu. Además, parece claro que los socialistas navarros cederán consejerías a sus socios, tal y como ha reclamado la dirección navarra de Podemos. 

Un pacto hecho...que peligra

A priori, la conformación de un "gobierno progresista" es sencilla para el PSN. Porque Geroa Bai, Podemos e IU ya han mostrado su disponibilidad. Y porque semanas atrás todos ellos ya firmaron un preacuerdo de medidas que apunta a que habrá alianza entre la izquierda y el nacionalismo vasquista. Sin embargo, la incertidumbre crece conforme se complica la investidura de Sánchez.
Está claro que sí hubiera pacto entre PSOE y Podemos en el Congreso, también habría acuerdo en Navarra. Pero no está tan claro qué pasará si, como parece -todo son hipótesis-, no hay pacto en Madrid. Entre tantas dudas, solo hay dos certezas: una es que Podemos también quiere consejerías en el Gobierno de Navarra del PSOE, aunque serán menos y los socialistas están dispuestos a dárselas; la segunda es que las bases del partido morado votarán para decidir si apoyan la investidura de Chivite. Esto último estará marcado por lo que suceda este jueves en el Parlamento. Por eso, crece la preocupación en el PSOE navarro. "Otro 'riojazo' es posible", remata la fuente mentada. 

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