La última oferta de Sánchez a Iglesias: una vicepresidencia simbólica, Cooperación y Lucha contra el racismo

El PSOE ha ofrecido a Podemos como parte de su última propuesta para llegar a una coalición competencias en Cooperación y Lucha contra el racismo. Se trataría de dos áreas vinculadas al Ministerio de Exteriores y a Trabajo, pero que en ningún caso significarían algo parecido a un ministerio con cartera, tal y como adelanta Vozpópuli. En cuanto a la vicepresidencia social que encabezaría Irene Montero, el PSOE insiste en despojar ese cargo de fondos propios. Es decir, que se quedaría en algo simbólico.  

El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha llamado personalmente este miércoles al líder de Podemos, Pablo Iglesias, para trasladarle su última oferta y advertirle de que no está dispuesto a ofrecerle competencias en Hacienda, Transición Ecológica o Igualdad, según han informado en fuentes de Podemos.

Sánchez le ha indicado que esta es su "última palabra", lo que implica que no tiene previsto hacerle una nueva oferta para intentar acordar un gobierno de coalición y superar este jueves la segunda votación de la sesión de investidura, prevista para las 14.30 horas.

La oferta del PSOE ha encontrado de momento el firme rechazo de Iglesias. El propio secretario general, según fuentes conocedoras de las negociaciones, ha ordenado a los suyos dar por rotas las negociaciones, aunque también comentan que todo puede cambiar en los últimos compases del día.

Podemos exige tener al menos un ministerio de peso del actual gobierno. Es decir, una cartera que pase del PSOE a manos de los morados. Además, quieren dotar de fondos propios la vicepresidencia del gobierno en el ámbito social, como adelantó este diario. Sin embargo, según mantienen dichas fuentes, la vicepresidencia a la que aspira Irene Montero en la última oferta del PSOE no solo se quedaría sin presupuesto, sino que de facto dependería de otra vicepresidencia, concretamente la de Carmen Calvo.

La reunión que han mantenido esta mañana Calvo y Pablo Echenique se ha interrumpido poco antes de comer. A partir de ese momento, todo se ha congelado. Los dos equipos negociadores no han vuelto a reunirse alrededor de una mesa, aunque sí han existido comunicaciones a través de los móviles.

Falta de confianza y apoyo externo

En el PSOE son muchos los dirigentes que sostienen que, después del debate parlamentario del lunes, la confianza del presidente en funciones con Podemos ha quebrado. El duro ataque de Iglesias en el que detalló parte de las conclusiones de las reuniones que tenía que ser discretas ha empujado a los socialistas a cerrar el grifo de las concesiones.

A la vez, en el PSOE creen que Podemos no puede aspirar a más de lo que ya se les ha ofrecido. Entre otras cosas, porque consideran que Iglesias tiene como prioridad evitar que se convoquen nuevas elecciones. En ese sentido, no se puede excluir que finalmente los morados, de saltar por los aires la coalición, se decanten incluso por asumir un apoyo externo a Sánchez, sin entrar en el Ejecutivo, para evitar nuevos comicios en noviembre.

Aun así, todo puede cambiar en las últimas horas. La votación sobre la investidura se celebrará mañana a partir de las 13 horas, y algunos confían en que en estas horas la cúpula de Podemos recule y acabe aceptando la propuesta del PSOE. En ella, afirman fuentes conocedoras de las negociaciones, también se baraja la cesión de un ministerio que, no obstante, no sería ni el de Igualdad ni el de Ciencia, que son los propuestos por Podemos. A esta hora de la tarde, la posibilidad de que nazca un gobierno rojo-morado está lejos de concretarse.