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Política

La 'inacción' en Cataluña y la corrupción del PP dan alas al "lepenismo español"

El ya expresidente del Gobierno, Mariano Rajoy.

Las sucesivas 'derrotas' judiciales en Europa del PP frente a los líderes del procés, con la llegada en el medio del ultra nacionalista catalán Quim Torra a la presidencia de la Generalitat, y la caída del Gobierno de Mariano Rajoy en manos del PSOE tras no asumir el primero responsabilidades políticas por la corrupción redundan en la posibilidad de que surja un espacio electoral 'antisistema' de tintes "lepenistas" en España, según distintos analistas. 

Para el experto electoral Jaime Miquel, el votante de derechas otrora 'simpatizante' del franquismo y hasta ahora fiel seguidor del PP, ha visto como sus representantes han sucumbido en la batalla contra el separatismo catalán, perdiendo batallas judiciales en Bélgica, Reino Unido y Alemania, y han 'permitido' que un líder 'antiespañol' como Quim Torra sea investido presidente de una Comunidad Autónoma del Estado. Unos representantes que, asimismo, han sido incapaces de superar una sombra de la corrupción que les ha llevado a perder el Gobierno en favor de la izquierda. 

"Ciudadanos está acaparando de momento ese espacio electoral, pero Ciudadanos nunca llegará a decir que hay que suprimir la Generalitat o que hay que irse de la Unión Europea para defender la soberanía española", dice Miquel, haciéndose eco de los límites del 'España Ciudadana' que ha comenzado a impulsar el líder de la formación naranja, a lo que el analista Ricardo Chamorro añade la caída del PP fruto, entre otras cosas, de su incapacidad para renovarse y recuperar una credibilidad hoy en declive. "Las encuestas nos muestran la caída del PP y también empiezan a mostrarnos que hay margen para que las ideas antisistema dentro de la derecha puedan llegar a tener representación en el Congreso", remarca Miquel. 

Dentro de esas ideas, Miquel incluye a partidos como Vox, que aboga por un 'brexit' judicial frente a los fallos de Europa respecto a los líderes del procés y ha pedido ya, tras la moción de censura, la convocatoria inmediata de elecciones.

¿Vox, al Congreso?

Dos sondeos de abril, uno de La Moncloa, y otro de Socio Métrica, pronosticaban ya escaños para Vox en las europeas de 2019, y en unas eventuales generales. Fuentes del partido han afirmado a este periódico tener acceso a varias sondeos que ya les darían diputados en Madrid (sede del partido), Barcelona (donde han 'abanderado' iniciativas judiciales contra el separatismo y confían especialmente en llegar a representar a los sectores más desencantados con el procés), Murcia, Asturias y Valencia.

Además, remarcan que tienen un nicho también en el público joven, contando con una presencia en las redes sociales que crece más rápido que la de ningún otro partido en Facebook mientras en Instagram disponen ya de una cantidad de seguidores equivalente a más de la mitad de los que tiene el PP. "Nos viene gente que antes votaba a Podemos o PSOE, defender a España no es ser de derechas o izquierdas", dicen desde el partido.

A la vuelta del verano, apuntan las mismas fuentes, se espera la 'oficialización' del fichaje de Steve Bannon, 'gurú' de Donald Trump, como asesor de Vox a la hora de combatir "la propaganda separatista catalana" en Europa en el marco de la campaña de las europeas de 2019. 'Recuperar' las competencias del Estado, garantizar el español en todo el territorio, ilegalizar los partidos separatistas, poner freno a la inmigración musulmana y replantearse la conveniencia para la soberanía nacional de seguir en la UE serán asimismo algunos de sus principales delineamientos electorales.

"Vox es liberal, no proteccionista como Trump o Le Pen en lo económico, pero va más allá que Ciudadanos en lo que respecta a la soberanía nacional", explica Chamorro. "Es quizás el punto que más le asemeja a Le Pen: si para defender la soberanía nacional hay que irse de la Unión Europea, probablemente lo haga; sin embargo, deberá apuntar igualmente a tener una marca propia, adaptada a la idiosincracia española, y en eso están; no hay que perder de vista que el nuevo Gobierno de izquierdas puede que les dé más cancha para dividir a la derecha". 

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