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Política

España se alía con Italia en inmigración tras rechazar unirse al eje francoalemán

La ministra de Exteriores, Arancha González Laya.

España e Italia buscan que su "voz se escuche alta y fuerte" en las negociaciones para establecer la nueva política de inmigración de la UE y que el Mediterráneo se vea "no como una zona en crisis, sino de grandes oportunidades comerciales".

Así lo ha asegurado la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, en su primera rueda de prensa en el Ministerio antes de mantener un almuerzo de trabajo con su homólogo italiano, Luigi Di Maio.

Se trata, han explicado ambos ministros de influir de manera conjunta en los grandes debates que debe afrontar la UE, como los presupuestos plurianuales, la inmigración, el Brexit o el necesario desarrollo de ambas orillas del Mediterráneo.

Para estrechar la colaboración, y conscientes que España e Italia "son dos piezas fundamentales para que funcione esta nueva UE", está prevista una próxima reunión entre el presidente Pedro Sánchez y el primer ministro italiano Giuseppe Conte, y la celebración de una cumbre bilateral, ha subrayado González Laya.

La ministra ha subrayado "el deseo de ambos países de ser constructores de soluciones comunitarias" en materias como la inmigración, un asunto en el que España e Italia coinciden en querer abordar "con justicia y solidaridad".

Documento sobre inmigración

Así, ambos países están trabajando en un documento no oficial en materia de inmigración que confían en que puedan suscribir los demás países del Mediterráneo.

"España e Italia conocemos más que nadie y tenemos capacidad y pericia para afrontar este fenómeno", ha asegurado Di Maio, quien ha subrayado que "España e Italia estarán a la vanguardia de este nuevo pacto".

González Laya y Di Maio también han analizado la situación en Libia y la emergencia del terrorismo que amenaza con desestabilizar toda la región, una situación que "debemos explicar juntos a nuestros vecinos de la UE", ha subrayado el italiano.

"La estabilidad en Libia significa la estabilidad del Sahel", ha subrayado Di Maio, quien ha añadido que "Europa es quien tiene más que perder si Libia sigue en esa situación de guerra" y por ello debe involucrarse en el bloqueo del tráfico de armas hacia ese país

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