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Política

Iglesias apuesta por un candidato más afín al separatismo por Barcelona

Pablo Iglesias, junto a Lucía Martín y Jaume Asens

Pablo Iglesias, secretario general de Podemos, ha decidido apostar por Jaume Asens como cabeza de lista de Catalunya en Comú para las elecciones generales del 28 de abril. Abogado y teniente de alcalde de Ada Colau, Asens se ha convertido en el hombre de confianza de Iglesias en los comunes. Representa el ala más independentista de una coalición que bascula entre el soberanismo y la agenda social. Pero los sectores más sensibles al eje social prometen guerra.

Este sábado Catalunya en Comú celebra su consejo nacional. El cónclave servirá para avanzar en el nombramiento de la persona que liderará los comunes. De momento, se barajan dos nombres principales. El de Asens, preferido por Iglesias. Y el de Gerardo Pisarello, primer teniente de alcalde de Barcelona, bien visto por los sectores más izquierdistas. Y, en la recámara, una sorpresa: Joan Mena, portavoz de la formación en el Congreso, apreciado por ambos sectores, pero adscrito a la facción de EUiA, que tiene un menor peso internamente.

"Nuestro hombre en Madrid"

Ayer, en el patio del Congreso la alcaldesa de Barcelona se mostraba poco propensa a decantarse por uno u otro candidato. Mantenía un perfil de imparcialidad y habló de respetar los sistemas de votación internos. Aunque otros miembros de su formación temen que el debate haya sido silenciado y que el candidato lo decidan en las altas esferas.

En este sentido, fuentes de la marca catalana de la formación morada, En Comú Podem, aseguran que Iglesias está empujando por Asens. “Es un perfil más friendly con el independentismo”, comentan. Asens acudió a las puertas del Tribunal Supremo en el primer día del juicio al 1-O y algunos consideran que aquel movimiento fue un mensaje de cara a las generales. “Puede convertirse en nuestro hombre en Madrid”, asumen los sectores más soberanistas.

Sustituir a Domènech

Colau, por su parte, parece haber aceptado a Asens como heredero de Xavier Domènech. Este último trabajó como hombre de consenso, pero su dimisión ha dejado un vacío difícil de rellenar. Miembros de Catalunya en Comú aseguran que la salida tanto Pisarello como de Asens significará para Colau liberarse de “dos figuras que le pueden hacer sombra”. Sobre todo de cara a una posible candidatura a la Generalitat. Así que ven “razonable” que la alcaldesa acepte la petición de Iglesias.

La cercanía de Iglesias con Asens es reconocida. Ayer, en la víspera del consejo nacional de Catalunya en Comú, Iglesias lanzó palabras muy dulces hacia el coportavoz del Ayuntamiento de la ciudad condal: “Es un abogado comprometido, un concejal incansable en el Ayuntamiento de Barcelona y un buen amigo”, escribió en las redes sociales.

La incógnita de la CUP

No todos, sin embargo, aceptarán ese nombramiento sin pelear. El hecho de que Asens apoye un referéndum de autodeterminación y considere que los presos del 1-O son “políticos” crea malestar en las facciones más sensibles a los temas sociales. “Asens no va a conseguir los votos de los independentistas aunque quisiera. Ellos votarán a la CUP o ERC. Mientras, perderemos los votos de izquierda”, consideran.

Los sectores reacios a aceptar Asens añaden que será “clave” saber si la CUP se presentará a las elecciones generales. Esa decisión la tomarán las bases de esa formación en los próximos días, pero en En Comú Podem ven con preocupación ese movimiento.

Cataluña es estratégica para Podemos. Hace tres años la marca catalana de Podemos fue la fuerza más votada, con más de 800.000 votos. Ahora, sin embargo, las expectativas son más modestas. Esto complica el encaje en la lista. Y a la espera de que la pugna por el liderazgo no acabe en una ruptura interna, como ha ocurrido en Madrid, Valencia y Galicia.

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