Ciudadanos denuncia el deterioro del barrio de El Raval de Barcelona por la ocupación y la inseguridad

"Las ocupaciones no se producen en pisos vacíos o pertenecientes a fondos buitre, sino a familias que no pueden irse de vacaciones y que hacen turnos para evitar que su propiedad sea ocupada". Así de contundente se muestra la presidenta del Grupo Municipal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Barcelona, Mari Luz Guilarte, en una entrevista con Vozpópuli. "Que los vecinos tengan que hacer esto -organizarse en patrullas- muestra hasta qué punto hemos llegado", ha denunciado.

La formación ha presentado su plan para atajar la crisis de seguridad en Barcelona. Sesenta medidas para las que se necesita un amplio consenso. La inseguridad no entiende de ideologías y afecta a todos por igual, por este motivo considera necesario arreglar la situación antes que pensar en una candidatura a unos Juegos Olímpicos.

"Barcelona no es una ciudad segura. Solo hace falta dar un paseo para observar que no hay niveles de seguridad que corresponden a una ciudad bien gestionada", indica la concejal en Barcelona. Estas son las consecuencias de una "mala gestión", la de Ada Colau, que "ha ninguneado a la Guardia Urbana, ha recortado los medios, hay una mala iluminación..." y todo aderezado con "el mensaje populista en el que las leyes son algo accesorio", donde el incívico tiene manga ancha, pese a la "buena voluntad" del responsable de revertir la situación, el socialista Albert Batlle, teniente de alcalde.

Dando un paseo de apenas medio kilómetro, la distancia que separa el Ayuntamiento de Barcelona hasta Las Ramblas, ha sido testigo este verano de "dos intentos de robo de carteristas a parejas de turistas y lateros vendiendo de todo menos latas", dos ejemplos de en qué situación se encuentra Barcelona.

"Tengo familiares a los que han intentado ocupar dos veces su vivienda en El Raval, motivo por el que han tenido que abandonarlas", ha afirmado. "El pánico y el miedo son insoportables. Se ejecutan delitos cada vez con más violencia", ha denunciado. "Primero te dan una paliza y luego te roban los 20 euros de la cartera", ha señalado. En Barcelona se han registrado desde el inicio del año 13 robos con resultado de víctimas mortales.

Ante esta situación, algunos vecinos se han organizado en patrulla, hecho que rechaza Guilarte ya que los "vecinos no deberían hacer el trabajo de la administración". "Se enfrentan a algo que supone un riesgo", ha advertido. "Poner a las personas en esa tesitura es un peligro que Colau está creando", ha asegurado.

Mantendrá la lucha para revertir el plan estrella de Colau

Tras una decena sentencias judiciales del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TJSC) contra el plan especial urbanístico de alojamiento turístico de Barcelona (PEUAT), Colau sigue adelante con este plan, pese a que se le exige una reordenación completa del mismo. Durante esta semana pasada, en las Comisiones del Consistorio, ERC se alió con los 'morados' para evitar las modificaciones. 

Guilarte no ha arrojado la toalla y espera que las medidas propuestas cuenten con el respaldo suficiente para modificar el PEUAT. "No se pueden hacer las cosas con prisas y lanzar globos sondas" como hace Colau, ha considerado. "Debe contar con todos los actores económicos", ha apuntado.

"Los hoteleros nos dicen que han estado ninguneados, acosados por las políticas populistas de Colau", ha reafirmado, al tiempo que considera crucial no darles la espalda porque de "este sector dependen muchas familias".

En Barcelona y como "medida provisional", Colau ha instalado contenedores de barco para utilizarlos como viviendas. Para la concejal se trata de "una extravagancia más de Colau". "No puede ser la política de vivienda de Barcelona, que debe pasar por invertir, por favorecer la colaboración público-privada y que se construyan pisos de alquiler asequible", ha considerado.

Juegos Olímpicos, sí, pero las prioridades son otras

"Me encantaría apoyar una candidatura de Juegos Olímpicos, pero las prioridades de Barcelona son otras, seamos realistas", ha respondido sobre la propuesta de Manuel Valls durante parte de la campaña. Barcelona tiene "infraestructuras sin terminar" y hay que acabarlas para que se siga "desarrollando y creciendo". Además, se necesita un alto grado de consenso para proponer la candidatura, acuerdos no solo con los partidos del Ayuntamiento, sino también entre la Generalitat y el Estado, cuyas relaciones pasan por un momento nefasto.