El asesor de Podemos fichado por Enagás firmó un manifiesto contra el gas

Cristóbal Gallego, quien ha cruzado la puerta giratoria junto a José Montilla y José Blanco al fichar por el consejo de administración Enagás, no siempre estuvo tan integrado en la industria gasística. Este asesor de Podemos, profesor universitario, doctor en Ingeniería Aeornáutica e investigador de energía eólica, el cual suscribió en 2018 un manifiesto contra el uso del gas, parece haber modulado su opinión por 160.000 euros al año.

Dicho manifiesto crítico, bajo el título “Gas no es solución”, instaba a "un análisis riguroso del papel temporal/residual del gas en la transición energética", porque le atribuye un impacto real en el cambio climático, "y que dicho análisis contenga un calendario concreto para su abandono", tal y como publica este martes el diario ‘El Español’.

Gallego rubricó el documento como miembro del Observatorio Crítico de la Energía, junto a otras 26 asociaciones e instituciones, entre las que también se encontraba Podemos. El Observatorio es un grupo de científicos constituidos como ‘lobby’ en 2007 como "un foro de discusión y análisis sobre la insostenibilidad ecológica y económica de nuestra sociedad y a la degradación de la cultura democrática".

Pese a que Gallego mantiene de momento su pertenencia a este colectivo, que aboga por "que no se destinen más recursos públicos a la promoción del modelo gasista", el futurible “consejero independiente” ha anunciado que donará “cada año la cantidad de dinero suficiente” como para que su “principal fuente de ingresos” sea su actividad profesional como profesor universitario.

Un sueldo de 160.000 euros

Sin embargo, Cristóbal Gallego no se compromete explícitamente a donar los 160.000 euros que cobraron en 2018 los miembros independientes del consejo de Enagás. Todo con el “objetivo” de “contribuir de la manera más efectiva posible a la lucha contra el cambio climático", por lo que quiere "garantizar" que su "interés por el cargo no tiene una motivación económica". 

Por su parte, Unidas Podemos niega que el fichaje de Gallego, a quien nombró como su representante en la Comisión de Transición de Ecológica hace unos años, sea un caso de las puertas giratorias que tanto ha criticado el partido liderado por Pablo Iglesias.