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Política

"Ábalos tenía razón: se habló de la violencia en Barcelona, no del salario mínimo"

La policía carga contra los Comité de defensa de la República, ayer en Barcelona

El ministro de Fomento y secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, puso en duda hace diez días la necesidad de celebrar un Consejo de Ministros en Barcelona ayer, viernes, por el riesgo de disturbios como los que finalmente se produjeron. "Hay que valorar si las cosas tienen un efecto positivo, si no, no acabo de entender tanto empecinamiento", decía.

A la mano derecha de Sánchez en el partido -cuyas dudas compartía el ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska- le desautorizó inmediatamente la Moncloa asegurando que "por supuesto" se iba a celebrar la cita, pero este viernes eran numerosas las fuentes socialistas que recordaban sus palabras.

"Ábalos tenía razón: se habla de violencia, de heridos, de detenidos, de los cortes de carretera en toda Cataluña, y no de una medida tan importante como es la subida del salario mínimo hasta los 900 euros", lamenta una fuente a Vozpópuli, que cree que se debería haber esperado a aprobar esa subida al Consejo de Ministros del viernes 28 de diciembre; "hubiera entrado en vigor igual el uno de enero", corroboran otras fuentes.

Los críticos creen que el PSOE se está metiendo en "una ratonera" en la que "cada vez nos va a ser más difícil explicar fuera de Cataluña lo que estamos haciendo"

No es solo que los consultados pongan en cuestión la foto de Pedro Sánchez y Quim Torra en la cumbre de gobiernos del jueves, como ha hecho el presidente aragonés, Javier Lambán, es que creen que el Gobierno y el PSOE se están metiendo en una "ratonera", dentro de una estrategia "que cada vez nos va a ser más dificil de explicar fuera de Cataluña".

El miedo que ha provocado el desastre en Andalucía entre presidentes de comunidad, alcaldes y, en general, todos aquellos que se la juegan en las elecciones autonómicas y municipales del 26 de mayo hace que muchos crean que lo debería hacer el partido es "alejarse de los independentistas, no pactar con ellos", en sintonía con Lambán.

Piensan que al único que puede venir bien esa política, a corto plazo, es al PSC y a su primer secretario, Miquel Iceta, que no oculta su satisfacción por la decisión de Sánchez de redoblar el diálogo con el PDeCat y ERC a pesar del desastre electoral de Susana Díaz en Andalucía.

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