El nacionalismo vasco se lanza a controlar el jugoso negocio del vino en Álava

El nacionalismo vasco quiere que los vinos de Álava se independicen de la marca Rioja. El Gobierno vasco, liderado por el PNV, ya ha tramitado la solicitud para la creación de la Denominación de Origen 'Arabako Mahastiak/Viñedos de Álava'. Una nueva marca que no acabaría con el tradicional nombre de Rioja Alavesa. Bildu respalda con entusiasmo la idea, los partidos no nacionalistas y la mayoría de bodegueros se oponen y el PNV, como acostumbra, apuesta por una solución intermedia que podría llamarse independencia en diferido.  

El vino de Álava genera un enorme negocio. Sólo en los seis primeros meses de 2019, las marcas alavesas exportaron 10,6 millones de litros de vino por valor de 61,9 millones de euros. Existen 340 bodegas que están registradas en la asociación de Bodegas de Rioja Alavesa-ABRA. Esta asociación está integrada en el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Rioja (DOC), donde también tiene voz pero no voto el propio Gobierno vasco. 

Entre los bodegueros alaveses hay una brecha entre la producción de las grandes y las pequeñas bodegas. La realidad es que 20 bodegas de la zona elaboran tres de cada cuatro litros que se elaboran en esta región. Todas ellas apuestan por seguir en Rioja. También la mayoría de bodegueros pequeños o medianos prefiere seguir con la denominación tradicional.

En ese contexto un tanto confuso se enmarca la tesis nacionalista de intentar independizar al vino alavés de la marca Rioja. Pero dicho intento tiene que ser aprobado por otras dos instituciones: el Ministerio de Agricultura, en primer lugar, y la Unión Europea, que tiene la última palabra sobre las denominaciones de origen.  

Gobierno vasco versus Consejo Regulador

La pasada semana saltó la noticia que conmocionaba al sector del vino en Álava. La Dirección de Calidad e Industrias Alimentarias del Gobierno Vasco tramitó la publicación en el BOE de una solicitud oficial para crear la Denominación de Origen Protegida 'Arabako Mahastiak/Viñedos de Álava'. Desde el mencionado Consejo Regulador de la Denominación de Origen Rioja (DOC), con sede en Logroño y donde se integran los bodegueros de la Rioja Alavesa, pusieron el grito en el cielo.

Más en concreto, el consejo riojano expresó su "malestar" frente a la solicitud del Gobierno Vasco para la creación del nombre 'Viñedos de Álava' y afirmó que la DOC Rioja "defenderá, hasta el final, con todos los instrumentos y medios políticos y legales, el patrimonio de todos sus inscritos", dejando "la puerta abierta a aquellos que deseen explorar nuevos caminos fuera de Rioja, con el veto a usar el nombre de Rioja Alavesa en sus vinos".

El presidente del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Calificada Rioja, Fernando Salamero, recordó que la asociación de Bodegas de Rioja Alavesa-ABRA cuenta con representación en el seno del Consejo Regulador y participa "activamente" en sus foros de discusión y afirmó que los miembros de la propia asociación "tampoco habrían sido informados debidamente de este movimiento", ya que "dicha iniciativa no ha sido tratada en asambleas". 

¿Qué bodegueros quieren escindirse?

En el caso de que las instituciones europeas dieran el visto bueno a la pretensión del Ejecutivo autonómico y, por ello, 'Viñedos de Álava' se escindiera de la marca Rioja, los bodegueros tendrían que elegir. O bien seguir bajo el sello de Rioja Alavesa o bien sumarse al nuevo sello. Una situación sin precedentes y cuyo resultado es difícil de vaticinar. Es decir, cada marca tendrá que calibrar hasta qué punto le conviene o no embarcarse en la aventura apadrinada por el nacionalismo. 

La consejera de Desarrollo Económico e Infraestructuras del Ejecutivo vasco, Arantxa Tapia, asegura que la administración "acompañará" tanto a los que cambien como a los que decidan quedarse en la marca Rioja. Y remarca que lo único que ha hecho su Gobierno es "dar cauce" a la solicitud de "unos bodegueros que, entiendo, han analizado muy bien la situación, que quieren diferenciarse, dar valor a sus vinos y a nosotros nos toca apoyarles en el camino que decidan". 

La duda estriba en qué bodegas son las que han decidido abogar por la ruptura con Rioja. Se supone que ABRA, la asociación de Bodegas de Rioja Alavesa, encabeza la idea de independizarse y crear una nueva denominación, pero no se sabe cuántos de sus 110 socios están de acuerdo con abandonar al sello riojano. Lo que sí es conocido es que se trata de una minoría de bodegas pequeñas, según desveló El Correo. 

Bildu aplaude, PSE y PP no y el PNV, ambiguo

No se trata sólo de una batalla entre empresas más grandes o pequeñas, sino que también hay un sustrato político de fondo. Sólo un grupo político aplaude la idea de crear una nueva denominación de origen únicamente alavesa: Bildu. En el PSE y PP, con gran presencia en los ayuntamientos de la zona donde se produce el vino, se oponen a alumbrar la citada 'Viñedos de Álava'. Podemos opta por llamar a la colaboración entre los diferentes agentes implicados. 

Y en el PNV juegan a su histórica ambigüedad, porque por un lado han prometido apoyo a quienes se desvinculen de la marca Rioja y han tramitado la solicitud, como ya se ha dicho, pero por el otro lado defienden que no es una buena idea separarse del sello riojano. Así lo han expresado tanto el diputado general de Álava, Ramiro González, como el presidente del PNV alavés, José Antonio Suso. 

La tesis imperante entre los peneuvistas es otra intermedia: crear una nueva denominación de origen que se llame Rioja Alavesa. Es decir, los jeltzales pretenden seguir bajo el cómodo paraguas de Rioja, pero con una marca propia que remarque la identidad vasca. Sería algo así como una independencia de Rioja, pero a medias; algo así como crear una subdenominación de origen.  

Esa idea del PNV parece harto improbable dado que ahora mismo no es posible legalmente y teniendo en cuenta que la DOC Rioja es la propietaria legal del término "Rioja Alavesa".