Todos hemos podido ver con horror este fin de semana en Twitter y otras redes sociales durísimas imágenes tomadas por las propias víctimas con sus teléfonos móviles durante el bárbaro ataque terrorista de Hamas a Israel: cadáveres profanados en las cunetas o subidos en jeep para su obscena exhibición, ancianos golpeados sacados de sus casas a la fuerza, y jóvenes asistentes a una rave en el desierto del Neguev golpeados y secuestrados para llevarlos a Gaza como escudos humanos frente al previsible posterior ataque del Estado Hebreo.
No quiero detenerme ahora en culpara quienes se llaman a sí mismos yihadistas por unos actos que se califican por sí solos, quiero analizar la frivolidad con la que las redes sociales han permitido colgar esas imágenes -tan puritanos en otras ocasiones cuando de un pezón o insulto se trata-; y, sobre todo, criticar a aquellos medios de comunicación que han acabado reproduciendo una y otra vez en sus informativos algo que antes las televisiones solo emitían con rostros pixelados y el aviso previo de “lo que van a ver a continuación puede herir la sensibilidad del espectador”.
Cualquier editor sabe que nunca se puede contribuir al fin último del terrorismo, que no es otro que es multiplicar el pánico entre la población, el único éxito militar (?) que pudo exhibir Hamas antes de volverse a Gaza a la espera de la represalia. El problema para los yihadistas y para quienes en España intentan justificarles so pretexto de la brutalidad cierta con la que se ha empleado el Ejército israelí durante tantos años, es que la barbarie, la vulneración de derechos humanos hasta convertirse y convertirnos a todos en animales, resulta pringosa, deleznable y contaminante de la causa -noble- del mal causado: Palestina.
¿Pretendía Hamas enajenarse el apoyo de las opiniones públicas europeas, suficientemente atemorizadas ya por los alentados yihadistas en nuestro suelo durante los -últimos quince años? Pues sí ese no era el objetivo, lo está logrando… Los ‘yihadistas’ y tantos propagandistas involuntarios en redes sociales y medios de comunicación a éste lado del mundo.
¿Pretendía Hamas enajenarse -aún más- el apoyo de las opiniones públicas europeas, suficientemente atemorizadas ya por los alentados yihadistas en nuestro suelo durante los últimos quince años? Pues sí ese no era el objetivo lo está logrando… Los yihadistas y tantos propagandistas involuntarios en redes sociales y medios de comunicación a éste lado del mundo.
¿Qué va a ser lo siguiente en esta escalada inhumana, la ejecución directa de alguno de los secuestrados y llevados a la fuerza a Gaza, entre los que hay dos españoles, el Vasco Iván Illarramendi (46) y la soldado israelí de origen sevillano, Maya Villalobo, al estilo de aquel Jihadi John, el londinense encapuchado que cortaba cabezas durante los días de vino y rosas del Estado Islámico en Siria? ¿Tendremos la desverguenza de seguirles el juego los medios occidentales dando cancha a esas imágenes por sumar un punto más de audiencia?
En Europa, y en España en particular, no son pocos quienes simpatizan con un Pueblo palestino que tiene derecho a vivir en paz y en libertad en un Estado digno de tal nombre, con fronteras seguras y una suministros a su población; no en esas cárceles superpobladas a cielo abierto que son Gaza y Cisjordania, donde se malvive prisionero de unas condiciones de supervivencia infrahumanas, sin agua potable ni electricidad en la mayoría de los casos.
Un silencioso “así no” recorrió muchas conciencias en España, donde no somos muy proclives, precisamente a las acciones del Estado de Israel durante el último medio siglo y, particularmente, las desarrolladas durante los últimos veinte años por el hoy primer ministro, Benjamin Netanyahu.
Pero mucha de esa gente que se solidariza con el sufrimiento palestino torció el gesto al ver las imágenes de esos jóvenes que bailaban en una Rave organizada en medio del desierto israelí, a la cual habían acudido ájenos por completo al horror del que iban a ser involuntarios protagonistas segundos después; como esa chica alemana, Shani Louk, que se ganaba la vida como tatuadora y ahora su madre anda suplicando a Hamas que deje de exhibir el cuerpo de su hija como trofeo militar (?) y se lo entregue.
Tanto horror en directo hizo que un silencioso “así no” se apoderara el pasado fin de semana de muchas conciencias en España, donde no somos proclives, precisamente, a lo que se considera imperialismo o supremacismo israelí sobre los árabes el último medio siglo, particularmente los desarrollados durante los últimos veinte años por el hoy primer ministro, el ultra Benjamin Netanyahu.
Es inevitable solidarizarse con cualquier víctima de la barbarie, del ensañamiento, del horror, y ponerse del lado de esa madre alemana que, seguramente, se enteró viendo en redes -o en los informativos, aún peor- cómo los asesinos de su hija exhibían impúdicamente su cuerpo en un Jeep cual trofeo de caza mayor mientras algunos descerebrados aquí en Europa intentaban justificar lo injustificable y algunos medios de comunicación hacían negocio con el dolor ajeno.
Ya no se pueden votar ni publicar comentarios en este artículo.
1300 años de incultura amontonada, sin conseguir salir de la Edad Media, persiguiendo infieles a sangre y fuego al grito de “alguien grande”, frente a los 500 años de paciente diáspora del pueblo judío. Habitualmente expulsados y delimitados a cloacas, cenagales, desiertos… Siempre han conseguido convertirlos en lugares aptos y dignos para vivir y con resultados económicos muy loables. Porque son trabajadores, cultos, investigadores, no imperialistas. ¡Zoquete! Resumiendo, a un judío le das un cubo de estiércol y te crea un edén. A los otros zánganos dales un edén y verás el resultado. Solo hay que pasearse por barrios que fueron burgueses,de aquellas capitales europeas que han “okupado con derecho de pernada ” y comprobar en qué los han convertido. Pongamos que hablo de Paris. Palestina es el fiel reflejo de la estupidez, ignorancia o maldad del buenismo europeo. Un permanente chorreo de dinero para mantener a unos criminales que cuando acaben con sus paisanos empezarán con nosotros, y para más inri en nuestra casa. Que ya se la estamos dejando bien acondicionada. Otra aclaración ¿ Netanyahu ultra? ¿Quizás los Ayatolás, Hamas y otras raleas sean los moderados? ¡Para no echar ni gota!
El columnista no se entera.
La "sentida solidaridad con los pueblos musulmanes oprimidos" ya no se lleva. Pasó totalmente de moda cuando la izquierda española dio la espalda a los saharauis.
A ver si nos ponemos al día de las modas progres. Compre el Vogue-woke-edition por ejemplo.
Una rave es una fiesta de drogados
"no en esas cárceles superpobladas a cielo abierto que son Gaza y Cisjordania" lo cachondo de los periodistas occidentales pro-palestinos (la mayoría, abducidos por el relato de izquierdas anti-sistema) es que no son capaces de entender por qué Gaza y Cisjordania están como están, ni por qué la Autoridad Palestina no pinta un excremento, ni por qué Al Fatah y Hamas estén en permanente guerra civil, ni entender por qué hay 1,5 milones de palestinos en Jordania que NO los quieren los palestinos de Palestina, ni en definitiva dejar de pensar en que los judíos son la encarnación del mal y qué pena que Hitler solo mató a 6 millones. Qu el fanatismo religioso de ambos lados de la frontera impide la paz es un hecho incontrovertible. Que a un lado de la frontera se vive en la Edad Media moral, es una evidencia que estamos viendo en estos días. Que Israel es una democracia plena, y que la mayoría de su población es moderada y está condicionada por los partidos ultraortodoxos, no tenemos más que vernos nosotros cómo estamos cayendo por obra y gracia de los supremacistas xenófobos vascos y catalanes. Pero hay un hecho incontrovertible. Los que cortan cabezas de bebés y utilizan escudos humanos NO SON ISRAELÍES. En el fondo, siento placer pensar que a todos estos periodistas que tanto daño están haciendo a la convivencia mundial con su sectarismo antisemita les tocará turno para que su cabeza sea cortada por Alah y los mártires de Al-Aqsa. Porque no lo duden, con estos crédulos "progresistas" llegará.
El problema de Europa no son los terroristas de la Yihad o de Hamas. No es la amenaza de Putin. No es la amenaza Comunista de oriente y centro-américa.
El problema de Europa son ustedes D- Gabriel, "izquierdistas" acomodados en la sociedad occidental que critican y destruyen la sociedad en la que gozan de toda la libertad. Vaya a "allí" a decir su opinión y verá.
Critica un acto horrendo y brutal pero no se olvida, en múltiples ocasiones, de decir lo malos malísimos que son los Israelíes.
Siento una profunda animadversión por personas como usted.
La verdad es que la empatía del autor de esta columna hacia los palestinos causa un poco de sonrojo. Los palestinos se han encargado, ellos (casi) solitos, en acabar con cualquier intento de solucionar el conflicto. Llevan decenas de años recibiendo ayuda humanitaria, fundamentalmente de Europa (los países árabes que les 'ayudan' sólo lo hacen para instigar el conflicto con Israel). ¿Qué han hecho con esos miles de millones aportados por Europa? ¿De verdad que no han podido usar ese dinero para las infraestructuras que les provean de agua y electricidad?
La verdad es que el destino de ese dinero es, cuanto menos, sospechoso. Sí que sabemos a ciencia cierta en qué se empleó parte de él: a pagar la vida lujosa de la mujer de Arafat (un sinvergüenza y un asesino) en París.
Mire, a mí los palestinos no me dan pena alguna. Los israelitas convirtieron un desierto en un vergel. Los palestinos convirtieron un desierto en un infierno. Si me he de poner del lado de alguien, tengo claro el lado que elegir. Estoy harto de las simplezas ésas de ponerse del lado del 'débil'.
Cuando tuvieron la posibilidad de votar libremente, eligieron Hamas. Pues que se atengan a las consecuencias. Espero que Israel actúe con determinación y logre arrasar a Hamas de una vez por todas. Cueste lo que cueste. Quizás sea ésa ;a verdadera solución para los palestinos. Al menos para los que queden.
Completo y preciso el comentario.
Es necesario dar un golpe decisivo a Hamás, pero lsrael debe elegir bien el momento en que debe detenerse, para no echarse encima una hostilidad islámica que venía apagándose en muchos lugares y que hoy contemplan todavía con relativo silencio lo que pasa en la Franja de Gaza.
También espabilar y exigir responsabilidades internas por el fallo en la seguridad.
A largo plazo, Israel tiene que rendirse a la evidencia de que se necesita un estado palestino viable, lo que supone dejar poco a poco los asentamientos de Cisjordania (los altos del Golán creo que debe mantenerlos, es demasiado riesgo el devolverlos).
Los palestinos deben reconocer la existencia y seguridad de Israel (como Egipto y Jordania) y no exigir el retorno de los que se han marchado.
Si no se hace así no veo solución y siempre habrá grupos terroristas, Hamás u otros, llenos de odio y resentimiento.
La ayuda humanitaria de Europa tiene que asegurarse de que las ayudas no se utilizan espúreamente.
Palestina es un no-estado.
Hasta los israelies lo han intentado cediendo Gaza ganada en guerra, no lo olvidemos, pero no hay manera.
Internamente llevan decadas con una guerra civil inacabable entre Hamas-Hizbola_chiies iranies y la fantasmagorica Autoridad Nacional Palestina de vividores corruptos.
Europa ha preferido pagar y desentenderse con lo que los fondos van a parar a bolsillos corruptos y ahora a armamento para agredir a su vecino.
El no-estado es ya una zona no-go donde no existe mas ley que la sharia de los caciques de hamas y se ejecuta a la gente por disidencia.
Lamentablemente la población vive alienada y machacada con conceptos nacionalistas cultivando un odio atroz a los judios generado en la calle y las mezquitas.
Odio a su nivel de vida justo al otro lado del muro, odio a la libertad de las mujeres que enseñan su cuerpo siendo respetadas, odio a la prosperidad mientras ellos siguen hacinados y en la dogmatica edad media.
Ese conflicto , alimentado desde el exterior, por supuesto, es el conflicto entre occidente ya en decadencia y el oriente islámico que no se supo nunca adaptar a la modernidad (por eso cayo el imperio otomano, el antiguo regidor por siglos de esas tierras). La civilización contra la barbarie ya indisimulada del Alahu Akbar gritado al degollar a un bebe o al violar a una chica..
Simplificar esto cuando tenemos millones de potenciales yihadistas en occidente es condenarnos a desaparecer.
De hecho nos estamos suicidando.