Publicado: 21/12/2015 04:00
La euforia que el sondeo a pie de urna de TVE desató en la izquierda se apagó cuando comenzó el recuento de los votos y se certificó que Podemos no era tan fiero como lo pintaban. Salvo para Antonio García Ferreras. El periodista de La Sexta se empeñó en leer los resultados como una debacle del PP y destacó sobre todas las cosas la caída de varias decenas de escaños del partido conservador con respecto a 2011. El presentador se sacó de la manga un pactómetro y buscó todo tipo de combinaciones para desbancar a la derecha del poder. Cuando vio que ni la suma de los escaños de PSOE, Podemos, ERC, UP y Coalición Canaria deparaban una mayoría absoluta, empezó a hablar de una “España ingobernable” que se dirige a unos comicios anticipados en 2016.
La primera parte de la noche electoral pivotó sobre el sondeo a pie de urna realizado por TNS Demoscopia para Televisión Española, que otorgó a los partidos del cambio (Podemos y Ciudadanos) bastante más fuerza de la que finalmente tuvieron. Eso despertó una euforia en los analistas progresistas que se apagó progresivamente a medida que avanzaba la noche y se rebajaban las expectativas con respecto al partido de Pablo Iglesias. A las 20.00 horas, García Ferreras hablaba de "tsunami político" y de "castigo al bipartidismo". A las 23.00, de una España que el PP tendrá "muy difícil" gobernar, pero en la que Podemos no había conseguido superar al PSOE.
Salvador Sostres aseguró que la campaña de Rivera fue "narcisista" y "profundamente cursi"
El entusiasmo que el presentador de Al Rojo Vivo mostraba al principio de la noche también lo expresaba Carolina Bescansa en Televisión Española, donde, con expresión de satisfacción y dificultad para expresarse con prudencia, afirmaba que en las calles de España se había comenzado a respirar un aire de cambio que sopló menos fuerte a su favor a medida que avanzaba el escrutinio.
La candidata de Podemos participó en TVE en una tertulia moderada por Sergio Martín en la que también estuvieron presentes Andrea Levy (PP), Meritxell Batet (PSOE) y Begoña Villacís (Ciudadanos). Esta última fue especialmente combativa y no dudó en meter el dedo en el ojo a sus compañeras de mesa. Viniera o no a cuento. En especial, a la socialista, a la que recriminó con vehemencia esa actitud tan clásica de su partido consistente en prometer cosas durante la campaña que en absoluto cumple al llegar a la Moncloa.
También fue beligerante Rafael Simancas (PSOE), que en el debate que moderó en La Sexta Ana Pastor, no dudó en emprenderla contra la derecha ("El PP pierde 60 y el PSOE 15. Aquí se ve quién se descalabra más") y contra Podemos y Ciudadanos ("Los nuevos partidos no se presentaban para obtener 20 y 60 diputados. Lo hacían para ganar"). A la misma hora en que pronunciaba estas frases, Javier Maroto (PP) lanzaba un mensaje que se repetirá una y otra vez en las próximas semanas: "Si se abstienen (en la sesión de investidura y no apoya a Rajoy), habrá nuevas elecciones en mayo".
Mientras avanzaba el recuento y las palabras "pacto" y "diálogo" ganaban peso en el discurso de los portavoces de los partidos emergentes -con menos fuerza de la que les otorgaba el sondeo de TNS Demoscopia-, Salvador Sostres se lamentaba por la pérdida de fuerza del PP, en detrimento de estas dos formaciones. Desde la Cadena COPE, en el informativo encabezado por Carlos Herrera, calificaba a los españoles como "mediocres" por este resultado, al haber sido engañados por los cantos de sirena de Iglesias y Rivera. A este último, le criticó abiertamente por el equivocado enfoque del que dotó a su campaña electoral: "A Rivera le han sobrado espejos. Ha estado narcisista y profundamente cursi en esta campaña", destacó.
Del autobombo de El País a la complicidad con Mas de la prensa catalana
La noche electoral volvió a mostrar a un Juan Luis Cebrián especialista en mirarse al ombligo. Ensimismado en su particular idea del periodismo, con la que pretende demostrar al mundo que todo empieza y acaba en el Grupo Prisa. El presidente ejecutivo de esta compañía aprovechó el 20D para organizar un programa de televisión que retransmitió a través de ElPaís.com que ni destacó por el despliegue de medios que incluyó, ni por la clarividencia de sus analistas, ni por la riqueza de sus contenidos. Eso sí, su dosis de autobombo fue desproporcionada, con conexiones en directo con la redacción del diario generalista de este grupo y con varias referencias que situaban a este medio de comunicación como el protagonista de una suerte de "conversación global".
La prensa catalana, fuertemente subvencionada por la Generalidad, ocultó los malos resultados cosechados por el partido de Artur Mas
La interpretación que realizó este rotativo de los resultados de las elecciones coincidió con la del resto de las cabeceras de tirada nacional. A medianoche, El País titulaba con "El PP gana, pero tendrá muy difícil formar gobierno", El Mundo con "El PP gana, pero tendrá difícil gobernar; Podemos irrumpe como tercera fuerza", ABC con "España, sin gobierno" y La Razón con "El PP gana las elecciones con un Parlamento muy fragmentado".
La prensa catalana coincidió en este análisis, salvo El Periódico, que situó a Convergencia Democrática de Catalunya (CDC) entre los grandes perdedores de la noche. El resto (La Vanguardia, Ara y El Punt Avui), restó importancia al golpe sufrido por el partido de Artur Mas o directamente lo escondió en su web, a sabiendas de que el hecho de que Esquerra Republicana haya obtenido un buen resultado, podría alterar el equilibrio en la coalición Junts pel Sí, en perjuicio del todavía presidente de la Generalidad. Por descontado, en el tratamiento de la derrota de CDC que realizaron estos tres diarios también influye la generosidad que ha demostrado Mas hacia la prensa catalana durante los últimos años, a la que ha regalado miles y miles de euros en forma de publicidad institucional y de jugosas subvenciones.
La prensa internacional destaca la victoria pírrica de la derecha
Las elecciones que prometían romper con el bipartidismo en España fueron seguidas con una especial atención por la prensa internacional. Financial Times (EEUU) lleva este lunes en su portada el titular "España apuesta por la inestabilidad política después de que Rajoy haya perdido la mayoría absoluta". Por su parte, The Guardian destacaba el domingo por la noche en su web la victoria por mayoría simple de los conservadores españoles, mientras que Le Monde que "ningún partido podrá gobernar solo", Le Figaro que la derecha encabecerá el Parlamento, pero sin mayoría; y La Repubblica que el PP obtiene una victoria sin mayoría y que Podemos irrumpe como tercera fuerza política.
El diario Clarín, argentino, titulaba su edición web "El PP de Rajoy ganó las elecciones, pero sin mayoría para formar gobierno". The New York Times hacía referencia a la "nueva era política" en la que entró España este domingo, así como a las posibilidades de cambio que se abren con la irrupción de nuevos partidos en el Congreso. La 'BBC' destacaba la pérdida de fuerza de los populares, mientras que el Ta Nea griego hablaba de la pérdida de fuerza del bipartidismo.
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