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Opinión

La adorable Díaz Ayuso

Isbel Díaz Ayuso

La izquierda ha decretado que la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, es una pija tonta que no merece el puesto que ocupa. La izquierda prefería al obispo Gabilondo, que es el tipo más aburrido y menos eficiente del mundo, o al niño precomunión Iñigo Más País, que no ha dado un palo al agua en su vida, pero esto no pudo ser. Por fortuna.

Esta concatenación de hechos demuestra que la señora Diaz Ayuso es inteligente y hábil, pues vencer las resistencias de Vox y los enormes complejos de Ciudadanos para ser finalmente investida requirió de gran fortaleza de espíritu así como de guante de seda. Pero esto le da igual a la izquierda, que no soporta ni ha asimilado que tanto el Ayuntamiento de la capital como el Gobierno de la Comunidad estén de nuevo, o sigan, en manos de los populares, que han hecho de este territorio el más rico, el más próspero y el más habitable desde el punto de vista social.  

Ahora se ha montado un escándalo porque, en un debate en la sede del Parlamento regional, la señora Díaz Ayuso, en respuesta a las diatribas de la oposición de izquierdas, y aprovechando el escandaloso uso electoral que el presidente en funciones, don Pedro Sánchez, está haciendo del nuevo enterramiento de Franco (“han tenido que pasar 40 años de democracia para que los socialistas acaben con el mausoleo del dictador”), haya preguntado, retóricamente, en la cámara que qué vendrá después, si las parroquias arderán como en el 36. A mí me parece que la señora Ayuso está en su derecho de usar esta clase de recursos retóricos sobre los que los socialistas y la izquierda en general tienen derecho de pernada. Y además puede hacerlo  porque, en efecto, en el 36 los socialistas y los izquierdistas quemaron parroquias, violaron a monjas y liquidaron a sacerdotes, además de a otros miembros de la sociedad civil que no eran de su agrado. O es que la memoria histórica sólo va a valer para los resentidos que perdieron la Guerra Civil y quieren ganarla ahora, ochenta años después? 

Casado ya ha demostrado la fortaleza que tiene que tener un líder nombrando a Cayetana Álvarez de Toledo portavoz parlamentaria, y debe hacer lo propio apoyando a la señora Diaz Ayuso

El caso es que la jauría mediática que trabaja sin desmayo en apoyo de Sánchez ha montado en cólera, y en este objetivo único y total que persiguen, que es destrozar a la derecha, pues ha recabado la opinión de algunos melifluos miembros del PP, o eso dicen, que se han sentido igualmente ofendidos y escandalizados por esta aparente pérdida de la templanza, de la moderación y del centro. A la mierda con todos ellos. El PP jamás ganará las elecciones si se construye desde el miedo, y a imagen y semejanza de lo que la izquierda quiere que sea la derecha: una derecha lanar y gallinácea, que no se atreva nunca a sacar los pies del tiesto. Sería un error que Pablo Casado cayera en esta trampa que le quiere tender la vil progresía, su armada mediática, e incluso parte de su propia tropa adocenada y temerosa. Casado ya ha demostrado la fortaleza que tiene que tener un líder nombrando a Cayetana Álvarez de Toledo portavoz parlamentaria, y debe hacer lo propio apoyando a la señora Diaz Ayuso, que fue su apuesta personal, y de la que tengo una gran opinión, ya sea a contracorriente, por su proyecto liberal, en favor de las sociedades abiertas y en contra del socialismo. 

No tiene el desparpajo ni la finura de Álvarez de Toledo, pero si Woody Allen la hubiera conocido, hace tiempo que habría sido protagonista principal de sus comedias, porque tiene una belleza clara y ese aire frágil y melancólico que tanto le gusta al cineasta. No seguiré más por este camino para no incurrir en machismo. A mí la señora Diaz Ayuso me gusta porque los tiene bien puestos y no se arredra ante la tiranía que nos quiere imponer la izquierda y su falsa superioridad moral. 

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