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Los trabajadores de Unedisa se plantan: rechazan los recortes laborales exigidos por RCS

Concentración de trabajadores en la puerta de la sede de Unidad Editorial en contra del ultimo ERE cerrado a finales de 2012.

La asamblea de trabajadores de Unidad Editorial, matriz de los rotativos 'El Mundo', 'Marca' y Expansión', han tumbado en este miércoles el preacuerdo alcanzado en julio por la empresa y la representación sindical para llevar a cabo nuevos recortes salariales de cara a dar luz verde a una ampliación de capital que inyectaría la liquidez en una empresa que desde 2007 acumula multimillonarias pérdidas.

Fuentes de la plantilla explican que el primer recuento de los cerca de mil votos suscritos evidencian casi 50 más votos negativos a las medidas que incluían descuentos progresivos del sueldo del 3% al 10%, bajas voluntarias y permisos retribuidos con el 20% del salario, entre otras medidas a aplicar hasta enero.

De la aplicación de las medidas de ahorro que exigía el accionista mayoritario -Rizzoli Corriere Della Sera Mediagroup (RCS)- hacer efectiva una ampliación de capital de 400 millones de euros en una empresa con notables necesidades de liquidez.

La antigua Unedisa sigue sin digerir la compra del Grupo Recoletos (por algo más de mil millones de euros, una operación que seis años pone al borde de la quiebra a uno de las principales compañías de comunicación en España. Las cuentas de su matriz italiana RCS (posee más del 96% del accionariado) reflejan que la firma sumó más de 470 millones de números rojos en 2012, un resultado que se vio penalizado por una amortización superior a los 400 millones correspondientes a la citada operación corporativa. 

Reducción de plantilla de 700 personas en cinco años

Unidad Editorial aplicó un expediente de regulación de empleo en 2009 que afectó a más de 160 profesionales, un recorte al que se sumaron otros 200 con el cierre de Veo TV. Hace un año, concluyó otro ERE en 2012 con cerca de 300 despedidos. En total, en los cinco últimos años el grupo ha rescindido el contrato a unas 700 personas de las 2.200 que lo integraban, según recuerda el FeSP.

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