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El hundimiento de las TV autonómicas: su negocio cae el 11,2% y su audiencia no sube

Un programa de Canal Sur

La situación de las televisiones autonómicas cada vez es más compleja. Su audiencia ha caído de forma drástica desde que arreció la crisis económica y los gobiernos regionales se vieron obligados a recortar la asignación anual que les destinan, lo que ha reducido su competitividad. A esto hay que sumar, entre otras cosas, el constante descenso de los ingresos publicitarios que han sufrido durante los últimos tiempos, lo que ha dificultado aún más, si cabe, el la tarea de cuadrar sus cuentas.

Los últimos datos de inversión publicitaria, publicados por la consultora Infoadex, ponen de manifiesto el descenso del negocio de estas empresas. En concreto, durante los tres primeros meses del año facturaron a los anunciantes el 11,2% menos que en el mismo período del año anterior. Ningún otro medio de comunicación -ni siquiera la prensa escrita- afrontó una caída tan acentuada como la de estas 'empresas públicas'.

Los datos del ejercicio 2018 no fueron mucho mejores. La recaudación que consiguieron las cadenas autonómicas, en su conjunto, fue de 102,2 millones de euros, lo que supuso un descenso del 10,5% con respecto a 2017. Todo esto, en un mercado en el que las televisiones nacionales en abierto cayeron el 0,8%; y en el que los canales de pago mejoraron el 13,4%.

A los problemas de ingresos publicitarios y de audiencia hay que sumar un tercero, relacionado con la Agencia Tributaria

Las televisiones autonómicas que están federadas en la FORTA iniciaron hace varios meses un proyecto para crear una comercializadora conjunta de publicidad, con el objetivo de aprovechar las sinergias que -consideran- existen entre ellas y sacar más rentabilidad del mercado de los anunciantes.

Sin embargo, el plan todavía no se ha materializado. Entre otras cosas, por la decisión de la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (TV3) de desvincularse de forma repentina de esta iniciativa, en una decisión que se atribuyó en el seno de FORTA tanto a motivos políticos, como comerciales, según señalan fuentes internas.

Una audiencia que no remonta

Esta dificultad para obtener ingresos publicitarios se explica, en buena parte, en la crisis de audiencia que viven estas televisiones. El mes pasado, su cuota de pantalla conjunta fue del 8,2%, por debajo de la que consiguieron Telecinco (14,1), Antena 3 (11,7), La 1 (9,4) y las cadenas temáticas de pago (8,5).

Este dato fue 3 décimas mejor que en abril de 2018, pero, a la vez, 3 décimas inferior al del mes pasado, según los datos de Kantar Media difundidos por Barlovento Comunicación.

El canal autonómico que registró una mayor audiencia fue TV3, con el 13,5% (-1,6 con respecto a abril), seguido de TVG, con el 9,8% (-0,1), Aragón TV, con el 8,8 (igual), ETB2, con el 8,5% (+0,4%) y Canal Sur, con el 7,6% (-0,7).

A los problemas de ingresos publicitarios y de audiencia hay que sumar un tercero, relacionado con la Agencia Tributaria, que hace casi dos años consideró que los fondos públicos que estas televisiones recibieron durante varios ejercicios por parte de las Administraciones autonómicas están sujetos al pago del IVA. El asunto está pendiente de resolución y están en juego 550 millones de euros, tal y como detalló La Información.

El futuro de estas televisiones

La situación de estas televisiones podría cambiar si los partidos promueven algunas de las iniciativas -y consiguen los apoyos parlamentarios suficientes- que incluyen en su programa electoral con respecto a estas empresas públicas.

Sin ir más lejos, Ciudadanos apuesta por reformar las televisiones autonómicas "para reducir gasto innecesario" y evitar el control ideológico por parte de los Ejecutivos regionales. "Garantizaremos la neutralidad y la pluralidad de los medios públicos de comunicación social, promoveremos su autofinanciación y, en su caso, impulsaremos la eliminación de aquellos que resulten manifiestamente inviables", añade en su programa electoral.

Vox propone una medida más radical y avanza que, si gobierna, eliminarán cargos y organismos duplicados y se cerrarán organismos destinados a crear estructuras paralelas al Estado, las televisiones autonómicas, defensores del pueblo, Consejos Consultivos, Agencias Meteorológicas.

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