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Telecinco convierte a Blanca Suárez en 'boina verde'

'Los nuestros', la nueva series de ficción de Telecinco, traslada a Blanca Suárez y Hugo Silva hasta Mali transformados en la cabo Isabel Santana y en el capitán Alberto Sánchez (David Vegal para Mediaset España).

Blanca Suárez ha cambiado los tacones de aguja y los vestidos de firma por el estampado militar. La actriz se ha puesto en la piel de la cabo Isabel Santana, una tiradora de precisión experta del Grupo de Operaciones Especiales (GOE) que acaba de finalizar un romance con el capitán Alberto Sánchez, interpretado por Hugo Silva, del grupo de Operaciones Especiales del Ejército Español. Sus caminos se vuelven a cruzar cuando son obligados a compartir una misión de salvamento.

Este es el punto de partida de Los nuestros, la nueva serie de ficción de Telecinco que se estrenará el próximo lunes, dirigida por Salvador Calvo (HermanosNiños robados). En ella, un grupo de efectivos militares formaran parte de una unidad de élite especial del Ejército de Tierra a la que se le ha encomendado una arriesgada misión: salvar a dos niños que han sido secuestrados por un grupo terrorista de Malí, en África Occidental.

Los nuestros es un producto muy novedoso ya que es la primera miniserie bélica de producción española. El elenco, además de Hugo Silva y Blanca Suárez, está compuesto por Antonio Velázquez, Álvaro Cervantes, Andros Perugorría, Sergio Torrico, Luis Fernández, Eduardo Lloveras, Gorka Lasaosa, Marina Salas, Tristrán Ulloa, Laia Marull, Pedro Casablanc o Daniel Grao, entre otros.

Asesoramiento permanente del ejército

La serie se ha creado con el asesoramiento permanente del ejército español, lo que ha asegurado que se refleje de la manera más fiable posible cómo trabaja un comando del GOE. Además, todos los actores recibieron entrenamiento militar y tuvieron oportunidad de convivir con sus homólogos en un cuartel, lo que les ha permitido descubrir de manera real qué supone pertenecer a una unidad de este tipo. Hugo Silva ha afirmado que poder convivir con miembros de este grupo le ha permitido preparar el personaje “desde un lado más profundo” ya que la serie, además de ser una ficción bélica, “está contando una historia humana”, ha añadido el actor.

Un rodaje complicado

Parte de la serie fue rodada en Fuerteventura para poder recrear el desértico paisaje de África Occidental. Además, también grabaron en instalaciones militares del ejército y en Bamako, la capital de Malí.

Las condiciones climatológicas presentes en Fuerteventura han sido uno de los grandes desafíos a los que se han enfrentado el equipo de producción y los actores. Como ha contado Salvador Calvo, el director de la serie, tuvieron muchos problemas con el viento y las tormentas de arena, llegando a tener que ensayar con unas gafas de soldador para poder leer sin problemas. La actriz Blanca Suárez ha añadido además que esos problemas provocaron incluso que tuvieran que parar de rodar muchas escenas porque era imposible filmar.

Las escenas de acción y riesgo han supuesto un reto añadido para los actores. Los golpes y las contusiones eran la tónica diaria del rodaje y muchos de ellos volvieron de Fuerteventura con algún moratón que otro.

Blanca Suárez, la chica de moda

La actriz ha cambiado su registro en esta serie. Ha pasado de papeles adolescentes y de niña buena a transformarse en una mujer de armas tomar y obsesionada por no perder nunca el control. Además de en Los nuestros podremos ver a la actriz en Perdiendo el norte, una comedia romántica sobre la fuga de cerebros, y en la próxima película de Alex de la Iglesia, Mi gran noche, donde comparte cartel con varios compañeros de la serie: Luis Fernandez, Antonio Velázquez y Hugo Silva.

Hace tan solo unos días, además, pudimos verla en los Spirit Awards donde se codeó con lo más granado de Hollywood. A pesar de que cuenta que su experiencia en la alfombra roja fue "muy enriquecedora", tenemos Blanca Suárez en España para rato. La actriz ha afirmado que sus visitas a la meca del cine son eso precisamente “solo visitas”. Suárez, de momento, no tiene proyectos a la vista que la obliguen a cruzar el charco ya que, como ha contado, su vida, “de momento, está aquí”. 

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