Cambio cuadro por tratamiento dental o piso en la playa

La Parking Gallery de Alicante y la empresa de gestión cultural CMASD 21 han organizado para el próximo 25 de mayo el proyecto Change Art, una iniciativa en la que el público puede adquirir obras de arte a través de intercambios "no comerciales" con los artistas. Por ejemplo: una pieza a cambio de una semana de alquiler en un apartamento en la playa o servicios de tratamiento dental si el que desea adquirir la obra es dentista. No importa lo que sea, siempre que sea bueno. El asunto radica en el trueque

Jaime Pérez, responsable de Parking Gallery y organizador, comenta que ésta no es una idea nueva, al menos en otros países. Ya en Bruselas se han puesto en marcha experiencias de este tipo. La idea, dice,  es impulsar un "coleccionismo democrático". El éxito de la transacción radica en conseguir ideas "que sorprendan a los artistas", al tiempo que sean "dignas" del valor de la obra.

A la convocatoria se han presentado más de 100 participantes, de los que se han seleccionado 25 obras, que serán expuestas y ofrecidas al trueque. Entre ellas, hay piezas de fotografía, de pintura o de escultura, de autores como Aurora Alcaide, David Rodrígeuz, David Delgado, Oscar Cabana, Paloma Blanco, Rubén Fresneda, Rafael Navarro, entre otros.

En cuanto al intercambio, el organizador ha señalado que varios amigos suyos han planteado la posibilidad de ofrecer alquileres en apartamentos, así como servicios de tratamiento dental, o cuberterías de plata. "Las propuestas son de lo más insólito, sobre todo se basan en ofrecer trabajo a cambio de arte, entendido como el trabajo de los artistas", ha puntualizado.

¿Cómo se comunican estas propuestas? Pues muy sencillo. Con post-tips. Al momento de acceder a la galería, después de pagar una entrada de 2 euros, el visitante recibirá un un taco de papeles adhesivos y un lápiz. Allí tendrá que escribir su propuesta y pegarla junto a las 25 piezas que estarán expuestas el 25 de mayo, entre las 17.30 y las 22.30 horas, en la galería.

La decisión final para aceptar el intercambio será de los autores -para lo que dispondrán de varios días-, al tiempo que la organización hará de mediadora. "Los artistas tienen que estar predispuestos a cambiar, aunque no tienen obligación. Las propuestas tienen que ser dignas, y los organizadores nos reservamos el derecho de declarar el proceso desierto", ha manifestado Jaime Pérez.