Un grupo de mujeres en una reunión de trabajo.
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Lograr una igualdad de género real y efectiva es uno de los grandes caballos de batalla de las sociedades actuales. Hasta tal punto es importante, que incluso ha merecido que las Naciones Unidas le haya dedicado uno de sus Objetivos de Desarrollo Sostenible, concretamente el ODS, nº 5 (“Lograr la igualdad entre los géneros y empoderar a todas las mujeres y las niñas”). Y es que la igualdad de género es un elemento clave para lograr unas sociedades más justas, inclusivas y cohesionadas.
En el plano laboral, esta reivindicación se ha convertido en uno de los estandartes de las políticas de Diversidad e Inclusión de las empresas y en uno de los ámbitos en los que se están visibilizando mayores progresos. Estos cambios vienen propiciados por una necesaria evolución de los clásicos roles de género en todos los ámbitos y también, en buena medida, gracias a la implicación de las empresas, muchas de las cuales han incluido la igualdad de género en sus políticas y objetivos. La sociedad ha cambiado y con ella unos entornos de trabajo en los que la diversidad de perfiles se hace indispensable para lograr los objetivos empresariales.
Uno de los territorios en los que más avanza la igualdad de género es en las posiciones directivas. A pesar de que problemas endémicos como techo de cristal o la brecha salarial de género siguen estando presentes en los entornos laborales, estos desequilibrios son cada vez menos acusados. Según el último informe “Gender 3000”, realizado por el Credit Suisse Research Institute, entre 2015 y 2021 el porcentaje de mujeres en los consejos de administración a nivel mundial ha aumentado en 8,9 puntos, y prácticamente se ha duplicado desde el año 2010. El creciente peso de los factores ESG (medioambientales, sociales y de gobierno corporativo) ligados a los planes de compensación de los ejecutivos es una de las razones de estos avances.
Sin embargo, aún queda mucho por hacer. Banco Santander es una de las entidades que con mayor fuerza está apostando por las estrategias de igualdad de género. El banco lleva tiempo trabajando para eliminar cualquier brecha salarial entre sus empleados e incrementar la presencia de mujeres por encima del 30% en puestos de dirección hasta 2025 como objetivos tangibles dentro de sus 10 Principios de Banca Responsable. Además, el grupo se fijó como objetivo elevar al 40% la representación femenina en el consejo de administración, una meta que ya ha alcanzado.
La entidad presidida por Ana Botín lleva años impulsando la igualdad de género en todos los mercados en los que opera a través de distintos programas como Prospera en Brasil, Banca Women en Argentina, Generación81 en España o Select ME y Tuiio en México. Con estas iniciativas, Santander no solo trabaja por lograr una cultura inclusiva y diversa en el seno de su propia plantilla, sino que también quiere ayudar a poner en valor el papel de las mujeres en la sociedad y apoyarlas en sus proyectos.
La entidad presidida por Ana Botín lleva años impulsando la igualdad de género en todos los mercados en los que opera a través de distintos programas
Además, la entidad ha lanzado el primer fondo de inversión en España dirigido a las empresas que más impulsan la igualdad y la adhesión a los Principios de Empoderamiento de las Mujeres de las Naciones Unidas. Otras vías mediante las cuales el banco está trabajando para acelerar el camino hacia una sociedad más diversa e igualitaria en materia de género son el programa de mentoring “De Mujer a Mujer”, desarrollado con la Fundación Integra en España, para apoyar a las víctimas de violencia de género, o el programa Reencuentra, cuyo objetivo es ayudar a aquellas mujeres que abandonaron su carrera profesional por motivos familiares a reincorporarse al mercado laboral.
Los esfuerzos realizados por la entidad la han hecho merecedora de ser designada como el banco con la puntuación más alta del mundo y la empresa que registra la segunda mayor puntuación en el mundo en el Bloomberg Gender-Equality Index, -GEI- 2022, el índice internacional que reconoce la excelencia y el compromiso empresarial en materia de igualdad.
Para su elaboración, Bloomberg evalúa la igualdad de género a través de cinco parámetros: el liderazgo femenino y la canalización de talentos, igualdad de remuneración y paridad de remuneración entre géneros, cultura inclusiva, políticas contra el acoso sexual y marca pro mujer. A cada categoría se le asigna una puntuación de cero a 100, siendo 100 la puntuación máxima. En concreto, Santander ha logrado una puntuación total de 90,26%. La máxima puntuación la ha obtenido en divulgación.
Banco Santander es la empresa que registra la segunda mayor puntuación en el mundo en el Bloomberg Gender-Equality Index 2022
Para Ana Botín, presidenta de Banco Santander, este reconocimiento supone un espaldarazo a las políticas de igualdad del banco. “El Índice de Igualdad de Género de Bloomberg establece un punto de referencia importante para que las empresas evalúen sus prácticas internas. Ser parte del mismo demuestra nuestro compromiso de apoyar la igualdad de género y crear un entorno inclusivo para todos nuestros empleados”.
En su edición de 2022, han participado en este Índice 418 empresas procedentes de 11 sectores de actividad y con sede en 45 países diferentes.