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El día en que la Reina por fin se vistió de Reina: Letizia triunfa con el rosa palo

El día en que la Reina por fin se vistió de Reina

La Reina Letizia ha tenido este lunes un acto en solitario de mucha altura: después de ponerse un vestido de casi 1.000 euros, ha sido la madrina del acto de entrega de una nueva bandera nacional al regimiento de especialidades de ingenieros Nº11 que se ha celebrado en Salamanca. Un acto castrense con mucho arraigo entre las mujeres de la Casa Real.

Desde que Letizia es reina a estas citas ya no viste de negro, de largo, ni de peineta, ni mantilla (lo hizo en alguna ocasión cuando le tocó amadrinar un acto similar en su época de princesa) cosa que sí que hacía su suegra, la reina Sofía o sus cuñadas, las infantas Elena y Cristina. Supongo que ir vestida de corto es una forma de modernizar la monarquía  como bien anunció su marido en la proclamación.

El caso es que aunque la reina haya ido de corto esto no le ha quitado ni un ápice de elegancia. Por fin veo a Letizia vestida como la reina que es, con un conjunto precioso acorde con el acto y la hora del día no como ocurrió en el almuerzo con el diario El Economista en el que llevó un atuendo más para salir de copas que para un acto a las dos de la tarde.

El caso es que hoy me ha gustado muchísimo como ha ido vestida. Para las ocasiones importantes que exigen un atuendo formal siempre recurre a Felipe Varela y esta vez ha dado en el clavo. Qué gusto dar ver a la reina vestida tan mona como va Kate Middelton, con colores pastel que no sean el blanco o el crudo, con un abrigo de entretiempo, que empiezan a ser habituales en su armario primaveral.

El conjunto en cuestión es un vestido de ‘crepe’ y un abrigo con solapas y bordado, una maravilla.  Creo que a Letizia no la habíamos visto con este color. Me gustan las mujeres, y también los hombres, con prendas en rosa palo porque es un tono que da luz, dulcifica y pese a la creencia popular no es nada cursi, al menos a mí no me lo parece. Este tono me parece perfecto para la época del año en la que estamos. Además a Letizia la he visto con un halo de glamour que me encanta, muy resuelta a la hora de saludar y sin ser la sombra de su marido.

La reina llevó zapatos de Magrit en colores lilas (le quedan genial con ese abrigo), el pelo recogido (muy bien, majestad) y el maquillaje ligeramente rosado.

Espero que este último conjunto os haya gustado tanto como a mí. La verdad que da gusto ver a la reina vestida de lo que es con un buen diseño, con buen patronaje, un color favorecedor y unos complementos apropiados.

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