Publicado: 17/04/2017 13:32
Los Reyes han disfrutado de toda la Semana Santa junto a sus hijas y aunque desconocemos el destino elegido, la Familia Real sí se dejó ver en la misa de Pascua en Palma de Mallorca. Se trata del tercer año consecutivo que Felipe VI y Letizia acuden como Reyes a la tradicional misa junto a sus hijas, una tradición que siempre venía acompañada de su posado a las puertas de la catedral desde hace años.
La familia llegó en un vehículo que conducía Felipe entorno a las 12:00 horas. Antes de acceder al templo por su puerta principal han saludado al público, a la delegada del Gobierno en Baleares, María Salom, al administrador apostólico de Mallorca, Sebastià Taltavull, y a miembros del cabildo catedralicio. Después, los reyes, sus hijas y doña Sofía han entrado en la Catedral por el pasillo central, estrechando la mano de algunos de los feligreses que abarrotan los bancos para asistir a la misa. Un año más, el Rey Juan Carlos no ha acudido a la cita.
A la salida de la misa, a las 13:00 horas, los Reyes se dieron un baño de multitudes en torno a un millar de personas que se concentraron alrededor de la catedral para ver y saludar a los monarcas y al resto de la familia. Felipe, Letizia y sus hijas saludaron a algunas de las personas que se habían congregado allí, a las que se veía muy emocionadas por verles tan de cerca, poderles dar la mano y hacerse fotos.
La Princesa Leonor iba vestida con un abrigo azul marino con bailarinas a juego, debajo se entreveía un vestido en color crudo con florecitas, mientras que su hermana Sofía, iba de rojo totalmente, tanto el vestido como el abrigo y las bailarinas. Llama la atención que pese a ser la pequeña esté ya más alta que su hermana. Sofía tomará la Primera Comunión en mayo, probablemente la tercera semana, y lo hará en colegio Santa María de los Rosales, donde lo celebró también su hermana, la Princesa de Asturias.
Los Urdangarin en Ciudad Real
Desde que se produjo el cisma en la Casa Real tras el divorcio de la Infanta Elena y Jaime de Marichalar y el caso Nóos, no hemos vuelto a ver a todos los padres, hijos y hermanos juntos. Mientras la Infanta Elena y su hija, Victoria Federica, se dejaron ver en Sevilla en la corrida de Morante de la Puebla junto a muchos famosos como el duque de Alba, Mario Vargas Llosa o Isabel Preysler, Esperanza Aguirre o María Dolores de Cospedal, entre otros; la familia Urdangarin eligió como destino el pequeño pueblo de Retuerta del Bullaque, en Ciudad Real para pasar las vacaciones de Semana Santa con sus hijos, seguramente para estar alejados de los paparazzi. Sin embargo, los vecinos no duraron en pedir al matrimonio tomarse fotos con ellos.
La familia Urdangarin se alojó en la finca ‘La Toledana’, de 2.000 hectáreas, propiedad de la familia Borbón-Dos Sicilias que durante décadas disfrutó don Carlos de Borbón-Dos Sicilias y Borbón-Parma, duque de Calabria e Infante de España, primo del rey Juan Carlos, que falleció hace dos años a los 77 años.
Allí se dejaron ver acudiendo a misa en la iglesia de San Sebastián, del vecino pueblo de Porzuna, ante el asombro de sus vecinos y en medio de un dispositivo de seguridad bastante visible. Pasada la Semana Santa, Iñaki Urdangarin deberá preparar su próxima comparecencia –el día 1 de cada mes- ante la justicia suiza para comunicar eventuales cambios de residencia tras la sentencia dictada por los tribunales españoles en la que se le condenó a 6 años y 3 meses de prisión por el caso Nóos.
Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina pasan la Semana Santa en un pequeño pueblo de Ciudad Real https://t.co/i5Ye2Rc2k6 pic.twitter.com/6Tu8g5Uwlm
— ShursToday (@ShursToday) April 14, 2017
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