Tardes flamencas para los sábados de otoño en Casa Galleta

No sólo el verano y las pistas de baile están pensados para disfrutar. Por eso, en Casa Galleta se han propuesto hacer más divertidas y flamencas las tardes de los otoñales sábados que se avecinan e inauguran su nueva propuesta de ocio el 15 de septiembre. El último restaurante de Carlos Moreno Fontaneda en abrir sus puertas contará en cada una de estas jornadas con un grupo de pop flamenco que despertará las ganas de bailar y cantar de los comensales. Juan Carlos Oviedo, formado en hostelería y especializado en eventos de este tipo, será el responsable de la programación que acogerá a un grupo distinto cada semana.

Entre las 17:30h y las 20:30h, sonará música en directo y se servirán las bebidas habituales de la carta líquida de Casa Galleta (cervezas, vinos, combinados y refrescos), además de los platos de la carta de entre horas. Las emblemáticas berenjenas rebozadas en galleta con pomodoro y parmesano, un poco de gazpacho, de salmorejo con crujiente de jamón o de salpicón de tomates con ventresca serán el acompañamiento ideal para los sones más raciales.

También se podrá acompañar la rumba con las croquetas de queso de cabra y frutos secos o las de cocido, además de la ensaladilla rusa con ventresca o la morcilla frita con queso de cabra, mermelada de manzana y cebolla carameliza. En estas fiestas, de marcado carácter español, tampoco podían faltar el jamón ibérico con pan de tomate, la tabla de quesos e ibéricos, los pimientos de Padrón y la tortilla de patata jugosa, o en su versión con chipirones en su tinta.

El revuelto de morcilla con manzanas y pasas o los champiñones rellenos de calabacín, queso trufado, tartar de tomate y mayo de lima estarán también disponibles junto a otras propuestas en esta carta de entre horas para compartir y para disfrutar, donde muchas de ellas tienen su versión en ración o más reducida en tapa.

Casa Galleta es la última apertura de Carlos Moreno Fontaneda, empresario madrileño y miembro de la conocida familia galletera y propone una cocina tradicional y de mercado que reinventa el concepto de casa de comidas españolas de finales del siglo XIX.